El Volvo China Open regresa al calendario del DP World Tour cinco años después y la gran pregunta a menos de 24 horas de que empiece el torneo es cuántos hoyos se van a jugar y cuándo va a terminar. El asunto meteorológico pinta horrible. Ha llovido mucho en las últimas horas, se espera que siga lloviendo y el radar advierte de amenazantes tormentas en el horizonte.
Lo peor de todo es que estos negros augurios se ciernen sobre el Hidden Grace Golf Club de Shenzhen, la sede del torneo, todos los días: jueves, viernes, sábado y domingo. A esta hora, la probabilidad de rayos y truenos es del 70 al 90 por ciento en cada una de las jornadas del torneo, a excepción del viernes que da una ligera tregua y baja al 50 por ciento. Albricias.
De confirmarse lo que cuenta el meteorólogo del DP World Tour, toca prepararse para una semana larga, con interrupciones, repleta de incertidumbre, acabando de jugar de noche, despertándose de madrugada… y sin saber muy bien a qué atenerse. Los golfistas más pacientes, los que sepan aceptar mejor lo que vaya dictando la madre naturaleza a cada momento, tendrán mucho ganado. Esta semana se trata de estar preparado cuando toque jugar, más allá de pegar mejor o peor a la bola. Concentración.
Obviamente, todo lo que sea empezar bien es bueno. No se trata de ir presionado desde el primer hoyo, pero sí ser consciente de que no es nada descabellado que el torneo se pueda reducir a 54 hoyos. En China, más que nunca, no dejes para mañana lo que puedas hacer hoy.
El recorrido, uno de los más exclusivos de China, situado al sur del país, casi en la frontera con Hong Kong, ha aguantado bastante bien de momento el agua caída. Es cierto que la bola se queda con barro en algunas ocasiones, pero se jugará colocando, como es obvio, y de momento no está demasiado pesado. Veremos qué ocurre conforme pasen las horas.
El Hidden Grace tiene una característica bastante curiosa. En los ocho primeros hoyos del recorrido no se pega el driver. Alguno habrá que lo haga, como es lógico, pero como normal general, los jugadores lo llevan guardadito en la bolsa y juegan madera 3, híbridos y algún hierro largo, ya en función de cuál sea la pegada de cada cual. El asunto es que los obstáculos está colocados de tal manera que entran mucho en juego con el palo más largo de la bolsa.
Sin embargo, a partir del hoyo 9 ya sí se pega el driver en todos los hoyos. Atención al 11, un par 4 corto en el que se puede llegar de uno. Seguramente, será uno de los rincones que más juego ofrezca esta semana. Sería aún más emocionante si estuviera en uno de los últimos de la vuelta.
Hay diez españoles en liza esta semana: Manuel Elvira, Nacho Elvira, Iván Cantero, Adrián Otaegui, Adri Arnaus, Alejandro del Rey, Pablo Larrazábal, Rafa Cabrera Bello, Ángel Hidalgo y Santiago Tarrio. Es la tercera vez que se juega en este campo este torneo como parte del calendario del circuito europeo y los mejores resultados de los españoles son un tercero de Jorge Campillo en 2019 y un tercero de Álvaro Quirós en 2014. Ese año, hace justo un década, Cabrera Bello quedó octavo.