Gran día del golf español en la segunda jornada del DP World Tour Championship que se está disputando en el Earth Course de Jumeirah. Adri Arnaus (-9), Jorge Campillo (-8), y Jon Rahm (-8) han protagonizado un soberano ataque de la furia en la Final de Dubai. La Armada ha sacado el tridente. Los tres en el top 5. están a tres y cuatro golpes de la dupla inglesa de líderes: Tyrrell Hatton y Matthew Fitzpatrick (-12).
El extremeño ha hecho 65 golpes, el de Barrika ha entregado una tarjeta de 66 y el de Moià ha firmado 68 para meterse los tres en la pelea por todo en el torneo. Festival rojo y gualda. Sólo el chino Ashun Wu (64) ha conseguido hacer menos golpes este viernes que Campillo, por ejempo. Jorge, Jon y Adri están magníficamente escoltados por Adrián Otaegui (-5), autor de una tarjeta de 68 golpes. Jugaba con Rory McIlroy (-5) y ha empatado con él.
Adri Arnaus (-8) empezaba su vuelta como un tiro, con tres birdies en los primeros siete hoyos, pero después sufría un inoportuno frenazo que lo ha dejado un poco frío. De ahí al hoyo 18 sólo hacía un bogey y se le escapaban entre los dedos un montón de buenas opciones de birdie con putts bien tirados. Uno de esos días en los que el factor suerte no está de su lado.
En cualquier caso, el jugador catalán se ha desquitado como los grandes. Ha sellado su vuelta con un tiro galáctico en el hoyo 18. Desde la zona de madera suelta, a la derecha de la calle del 18, más allá del rough, ha ejecutado un golpe soberano para dejarse incluso una opción de eagle de algo más de seis metros que ha embocado. Espectacular. Ha terminado como McIlroy. Con ese putt se ha quitado de golpe el mal sabor de boca por las otras opciones que se le habían marchado. De este modo, Arnaus también está apuntalando su presencia entre los 30 mejores de la Race to Dubai y, por extensión, su clasificación para el Open 2023.
Rahm ha vuelto hoy a sus estándares en este escenario desértico de Dubai que también lo trata. Otra gran vuelta marca de la casa. Sin desplegar aún su mejor golf, pero bastante más certero que ayer, especialmente desde el tee, Jon se ha mostrado brillante en los greenes. Así arrancaba su ronda, con dos buenos putts de unos cinco y seis metros para birdie en los hoyos 2 y 4. Después, en las distancias de entre dos y cuatro metros ha estado demoledor. Así han llegado los birdies en los hoyos 6, 7, 10, 12 y 15. Es cierto que se le ha escapado alguna otra opción clara en el 13 y 14, pero el balance es extraordinariamente positivo para el vizcaíno.
Lo mejor de todo es que su golf no ha estado inmaculado. Aún se ha metido en algunos problemas desde el tee y tampoco sus hierros han sido un prodigio de precisión. Ha pegado buenos tiros, sí, de lo contrario no se hacen 66 golpes, pero también se ha metido en algunos problemas de los que ha salido casi siempre airoso. Su único tropiezo llegaba en el 9 tras fallar la calle y el green y cometer bogey.
Así las cosas, Rahm ya está arriba y con su actuación de hoy concede aún mucho más valor al 70 que se marcó ayer. No fue un comienzo soñado, pero logró ganar al campo en un día donde todo parecía ir en su contra. Se le podía haber ido el torneo, pero tiró fuerte de las riendas, se mantuvo en la pelea y hoy ha obtenido la recompensa. Jon no puede ganar ya la Race to Dubai, pero sí se puede convertir en el primer jugador que gana tres veces esta final.
Jorge Campillo ha rubricado hoy una oda al putter. Su desenvoltura en los greenes ha sido de matrícula de honor. Ha metido más de 40 metros de putt en todo el día tanto para par como para birdie. Ha salvado tres putts de par muy delicados de casi tres metros y ha metido muchos buenos de birdie de siete, seis y tres metros. Prácticamente no se ha dejado nada.
El jugador de Norba se mete también en la batalla por la victoria en el DP World Tour Championship y, sobre todo, coge posiciones para clasificarse para el Open Championship. Los 30 primeros de la Race to Dubai al acabar la Final lograrán el billete directo para Royal Liverpool en 2023. Jorge llegó a Dubai en el puesto 48º y ahora en la proyección estará ampliamente metido entre los 30 mejores. Su resultado hoy de 66 golpes iguala su mejor tarjeta en el Earth Course, realizada hace ya seis años, en la última de 2016.
Adrián Otaegui (-5) ha jugado con Rory McIlroy y ha firmado otro gran resultado. Con sus 68 golpes se encuentra a las puertas del top 10. El norirlandés ha comprobado que el jugador de San Sebastián puede ser una máquina absoluta de precisión desde el tee. No en vano ha cogido todas las calles. Espectacular. Además, en el primer hoyo del día la metía desde la calle a unos 160 metros de la bandera. Desde luego, no parecía muy impresionado por el hecho de jugar junto al Número Uno del mundo y gran favorito a ganar la Race to Dubai.
Rafa Cabrera Bello (+2) ha conseguido ganar al campo este viernes, pero no ha sido suficiente para remontar de verdad en la clasificación. Necesita un fin de semana fuera de rango para tratar de meterse en el Open. La cruz del día ha sido para Pablo Larrazábal (+4). En un día para olvidar ha entregado una tarjeta de 79 golpes.
