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British Masters 2022 | Victoria de Thorbjorn Olesen

Olesen despierta de la pesadilla con un final que no se da ni en sueños

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Thorbjorn Olesen
Thorbjorn Olesen posa con el trofeo de campeón del British Masters.

El que pueda que lo explique. El desenlace del British Masters este domingo ha sido increíble. Ha ganado Thorbjorn Olesen (-10) con un final extraterrestre. Ni en mil veces que volviera a jugar los hoyos 17 y 18 repetiría un final así. Porque Olesen, diga lo que diga, había tirado la toalla unos cuantos hoyos antes…

Su última jornada en el Brabazon course de The Belfry estaba siendo una auténtica pesadilla. Todo ha empezado con una bola al agua en el hoyo 6. Ha pegado un golpe malo, muy cerrado desde el tee, y a partir de ahí se ha descompuesto. A partir de ahí y hasta el 17 ha pegado dos tiros buenos, en los hoyos 11 y 12. En el resto, ha estado recuperando, cuando ha podido, o claudicando con bogey por sus errores.

Los dos bogeys seguidos en el 14 y 15 parecían definitivos, especialmente  en el 15, un hoyo en el que contaba con dejarse una opción de birdie y acabó sufriendo para sacar el bogey. Estaba perdido. Había desaparecido del radar. Sólo una gesta lo metía de nuevo en la pelea.

Y eso es lo que ha pasado. Una gesta. Algo que te obliga a frotarte los ojos, a pellizcarte. Ha hecho eagle en el 17, pegando dos tiros muy buenos y metiendo un putt extraordinario de ocho metros y ha hecho birdie en el 18 metiendo un putt aún más lejano y más complicado. Tenía más de diez metros. Ciencia ficción. No sólo porque esos putts rara vez se meten, sino porque además venía del hoyo más profundo. La historia es si cabe más excepcional si nos acordamos de que ayer sábado acabó también con eagle y birdie en el 17 y 18. 

Olesen ha salido de la pesadilla con un final de ensueño. De una pesadilla doble. La primera era la ronda final que estaba haciendo. Se le veía desesperado, buscando soluciones, incrédulo ante lo que estaba ofreciendo su golf. Realmente se le veía derrotado. De la segunda pesadilla que ha despertado ha sido de la personal, de aquella acusación por abuso sexual que lo apartó muchos meses del golf de alta competición en 2019 (sancionado por el European Tour) y de la que finalmente le acabaron retirando los cargos. Le ha costado sangre, sudor y lágrimas rehacerse como jugador y como persona. Ni siquiera lo ha tenido fácil en el Tour con sus propios compañeros. Nadie sabe muy bien cómo comportarse ante situaciones así y Olesen lo ha pasado mal.

Habrá que ver ahora si esto supone un punto de inflexión o simplemente es una raya en el agua. Cuando le ocurrió aquello en el viaje de avión volviendo del WGC Match Play, el danés era uno de los mejores jugadores del mundo, top 50, hombre importante en la Ryder Cup de París… Estaba en la cima de su carrera. Tiene calidad para regresar, aunque también necesita que le acompañe su cabeza, algo que no siempre le ha funcionado tan bien como su swing. Por lo pronto, asegura su presencia en el US Open y pone muy a tiro el Open Championship.

Olesen también recibió cierta ayuda de sus rivales. Nadie fue capaz de llegar al -10 definitivo y eso que hubo muchos candidatos. La historia más dura fue para Richie Ramsay. El escocés fue el único, ni siquiera Olesen, que llegó al hoyo 18 con -10 en su marcador, pero su segundo golpe desde el centro de la calle y con un híbrido, acabó en el agua. Doble bogey. Adiós. El que se relamía en la casa club era el sueco Sebastian Soderberg, que consiguió acabar con un potente -9. El nórdico tiene motivos para marcharse de The Belfry con la sensación de que le han robado la cartera.

En cuanto a los españoles, Santi Tarrio (-4) ha sido el mejor de los nuestros. El gallego se marcha de Inglaterra con la autoestima reforzada. Lo necesitaba. Ha jugado cuatro vueltas y tres han sido bajo par y una al par. Sólido. El putter ha vuelto a funcionar. Veremos si sirve para poner en marcha la temporada. Ha terminado en el puesto 21º.

También consiguieron terminar bajo par Adrián Otaegui (-3) y Sebastián García Rodríguez (-3). Los dos han completado un torneo muy bueno. La cruz del domingo ha sido para Adri Arnaus (+1). Salía con opciones de dar un susto a los de arriba, pero un mal día con 78 golpes lo ha retrasado mucho en la clasificación. Más atrás terminaron Pep Anglés (+5), con albatros incluido, eso sí, Rafa Cabrera Bello y Gonzalo Fernández Castaño.

Resultados finales del British Masters 2022