Byeong Hun An (-9) ha confirmado su liderato en solitario en el Scottish Open una vez finalizada la primera jornada. Por un momento, pareció que Davis Riley (-7) podía incluso amenazar la posición del coreano, viniendo como venía con un parcial de siete menos por sus primeros diez hoyos, pero el joven estadounidense finalizaba con ocho pares consecutivos y entregaba una tarjeta de 63 golpes, que tampoco está nada mal.
Ambos, An y Riley, aseguraban justo después de terminar la faena que han disfrutado de lo lindo poniendo sobre el verde del recorrido del Renaissance Golf su golf más creativo, leyendo correctamente la influencia del viento y jugando con los contornos. Haciendo, vaya, lo que debe hacerse en un links para conseguir un buen resultado. Y, es cierto, algo ha soplado el viento. Pero no lo suficiente como para que el campo se protegiera de la mejor manera posible ante tantísimo jugón (hasta 73 han ganado hoy al campo).
Sin embargo, quizá no todo sea como ahora mismo parece en aquella maravillosa esquina de Escocia, cerquita de North Berwick, tierra mítica si de golf se habla. O mejor dicho: quizá no todo vaya a ser lo mismo de ahora en adelante.
El año pasado el ganador final del torneo fue Xander Schauffele con un acumulado de -7, pero los registros generales al final de la primera ronda guardaban algún parecido con los de hoy. También, entonces, teníamos a un líder en -9, que en aquel caso era Cameron Tringale, aunque es cierto que sólo 43 jugadores ganaron al campo…
A ver, igualito, igualito no va a ser, porque mañana viernes se espera una jornada de corte parecida a la del jueves en lo que se refiere al viento, así que seguirán dándose buenos resultados. Pero las previsiones siguen hablando de un sábado bastante más correoso y, sobre todo, de un domingo muy ventoso que todo lo podría cambiar. Entonces, el disfrute en los links puede tornar en llanto y crujir de dientes. Por cierto, tampoco parece probable que nadie pueda repetir la gesta de Schauffele hace un año, que arrancaba en la primera ronda a once golpes del líder y terminaba llevándose el gato al agua, saliendo ya incluso como líder en solitario a jugar la última ronda.
Adri Arnaus (-1) ha igualado en el turno vespertino de juego con Rafa Cabrera Bello (-1) como mejor español situado en la tabla, algo lejos de la zona caliente, como se ve. La pena es que el jugador catalán finalizaba su ronda con dos bogeys en los hoyos 8 y 9, cuando en realidad casi estaba llamando a la puerta del top ten. Mañana, Arnaus debe aprovechar el horario matutino, con algo menos de viento y los greenes un poquito más nobles.
(Un paréntesis final. Ya que hemos cruzado recuerdos y acontecimientos del año pasado, habría que señalar que Cabrera Bello salió a jugar el domingo en el partido estelar junto a Schauffele, habiendo firmado el primer día exactamente el mismo resultado que hoy, un 69. Hace doce meses no le fue bien al canario en aquella última jornada, pero tampoco es necesario que la historia se repita con exactitud de principio a fin…).