Una varilla de golf, unos pesos insertados donde debería ir la cabeza del palo, una aplicación de móvil, una pequeña cartera donde se guardan los pesos, un aparato del tamaño de un mando a distancia para medir la velocidad del swing y unos dos metros cuadrados de espacio para poder realizar el ejercicio. Eso es todo lo que hace falta para trabajar con el The Stack System, el método que utilizó Matthew Fitzpatrick para ganar distancia y que desde hace unas semanas está poniendo en práctica Rafa Cabrera Bello.
Encontramos al golfista canario en una de las esquinas del putting green del Club de Campo Villa de Madrid. Acaba de terminar su sesión de trabajo en el campo de golf y ahora se dispone a entrenar la velocidad de swing con el The Stack System. Nos permite asistir al entrenamiento para entender cómo funciona el sistema. Es interesante.
«Yo había utIlizado otros métodos en el pasado, pero no veía una evolución, no sentía que estuviera avanzando. En junio leí las declaraciones de Fitzpatrick después de ganar el US Open, donde explicaba el The Stack System, y decidí probarlo», explica Rafa a Ten Golf.
Fitzpatrick empezó a trabajar con este método en 2019. Aquel año estaba hundido en la clasificación de distancia con el driver. Su media era de 287,9 yardas y su velocidad de palo era de 112,78 millas. Hoy, tres años después, el golfista inglés, campeón del US Open, mueve el palo a casi 117 millas y promedia una distancia en el PGA Tour de 303 yardas. Ahora está más o menos en la media de los pegadores. Puesto 70º en distancia. La evolución es notable.
El The Stack System, como pueden comprobar, requiere paciencia y persistencia. El jugador se organiza a sí mismo con la aplicación. En cada sesión de trabajo se hacen 18 swings, siempre sin bola y con diferentes pesos que van entre los 60 y los 250 gramos aproximadamente, depende de cada jugador. No en todas las sesiones se hacen swings con todos los pesos. Los entrenamientos están programados y se realiza una sesión cada dos o tres días. Si te saltas algún entrenamiento, el sistema lo refleja. Sería como hacerse trampas al solitario.
El The Stack System no es lo único que está haciendo Rafa para ganar distancia y mejorar sus prestaciones en el campo de golf. Además, está llevando a cabo desde hace cinco meses un sustancial cambio de swing que también le debería ayudar a ir más largo. Siempre bajo la supervisión y la aprobación de David Leadbetter, que además de entrenador de Rafa durante muchos años es prácticamente parte de la familia, el golfista de Maspalomas comenzó a trabajar en mayo, concretamente desde el Soudal Open, con Jerome Theunis, profesor, entre otros, de Thomas Pieters.
Para no marear con datos ni explicaciones técnicas, básicamente el trabajo que está llevando a cabo Rafa va encaminado a realizar un swing menos vertical y más horizontal, de modo que pueda ayudarse con todo el cuerpo, especialmente las piernas. Aún hay que asentar los cambios, como ocurre en todo proceso de este tipo, pero Cabrera está más que satisfecho con lo que ve y con lo que siente.
Por cierto, en la sesión de ayer, con Ten Golf como testigo, Rafa batió récords de velocidad con dos pesos diferentes. Eso sí, que nadie piense que se ha vuelto loco con el asunto, ni por su cabeza pasa hacerse un Bryson DeChambeau. El vigente campeón del Acciona Open de España es consciente de que una de las grandes cualidades de su swing de golf es el ritmo y no va a cambiar eso de la noche a la mañana.
Es cierto que este sistema al ser progresivo permite incorporarlo poco a poco y de manera más natural al swing, sin cambios bruscos. Eso sí, en alguno de los últimos torneos, cuando ha necesitado apretar un palo, sí ha notado más distancia de la que hacía normalmente. Se trata de ir poco a poco. Piano a piano. Peso a peso.
