El 2 de mayo de 2010 Álvaro Quirós entró en un selectísimo club, el de los españoles que han ganado el Open de España. No se crean que son muchos, sobre todo en la era moderna. Desde el triunfo de Antonio Garrido en 1972 hasta el suyo sólo Sergio García y Seve Ballesteros se habían hecho con el botín.
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Quirós derrotó en el desempate al inglés James Morrison. Era su cuarto triunfo en el European Tour. Cuatro de cuatro. Cuatro temporadas seguidas ganando. Lo conquistó en el Real Club de Golf de Sevilla, un lugar muy especial para él, no en vano su novia entonces y hoy mujer, María López Castro es sevillana. Una de las imágenes que dejó aquel Open fue el beso que la pareja se dio en el green del hoyo 18 después de certificar el triunfo.
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Aquella victoria fue la consolidación absoluta de Quirós como uno de los estandartes del golf europeo. Estaba ya más que asentado en el top 50 del mundo y lo único que le quedaba ya era el gran salto en los escenarios más importantes, algo que llegaría un año más tarde.
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Quirós ganó aquel Open de España porque supo sufrir de maravilla el domingo, metiendo dos putts claves en los hoyos 10 y 17. Después, Morrison, que venía de ganar en Madeira unas semanas antes, mandaría la bola al agua en el playoff y le dejaría las puertas abiertas del triunfo.
Así contamos aquel triunfo de Álvaro Quirós en el Open de España en 2010: