Esta semana se disputa el Made in Himmerland, heredero directo del Made in Denmark, que alcanza en 2021 su séptima edición. Cinco de las anteriores se disputaron en el Himmerland Golf, que ahora da nombre al torneo y que, por supuesto, sigue siendo el escenario del mismo. Un campo del que todos recordamos su hoyo 16, un par 3 corto con un anfiteatro natural en el que hay una posición de bandera, en la plataforma de abajo, donde suele darse algún hoyo en uno cada año, además de un gran número de tentativas, para gozo y disfrute del aficionado.
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En concreto, en cinco ediciones ya disputadas en el Himmerland Golf, se han visto ya seis hoyos en uno en el famoso 16. Pues bien, se trata del mismo número de eagles, seis, que se han dado en cinco ediciones en uno de los pares 5 del campo, el hoyo 11, estación del recorrido que bien merece un comentario aparte, puesto que se trata de uno de los pares 5 más complicados del año en el circuito europeo, sino el que más, hasta el punto que en cada edición, una vez consumidos los 72 hoyos pertinentes, la media de golpes en dicho hoyo es superior a 5. En concreto, dejando a un lado los eagles (muy pocos: sólo seis en cinco ediciones, como ha quedado dicho), y los grandes números, el registro de birdies es siempre inferior al de bogeys. A día de hoy se han firmado allí 352 birdies en cinco ediciones, por 445 bogeys…
¿Qué tiene este par 5, que lo transforma en semejante desafío? Lo primero y fundamental es que es muy largo. Desde el tee de atrás llega a los 590 metros. Un par 5 puro… Y duro. Porque además suele jugarse con viento en contra, de tal manera que ha sido relativamente común ver a jugadores pegar el drive desde el tee, luego una madera 3 de segundo tiro y todavía les quedaba un hierro medio o largo de tercero. Nacho Elvira, por ejemplo, señala que “en este hoyo he pegado varias veces el tercer golpe con un hierro 4”.
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El hoyo tiene dos bunkers situados en el centro de la calle y es necesario un vuelo de bola de 240 metros para superarlos, objetivo que se complica mucho con viento en contra. De hecho, hay que puntualizar que con viento en contra suele adelantarse el tee, y aún así no cesan las complicaciones. Si te vas a uno de esos dos bunkers, el bogey ya está llamando a tu puerta. Adrián Otaegui, el español que acumula mejores resultados en este campo, ha llegado a pegar una madera 3 de tercer tiro en este hoyo…
Este año, curiosamente, se está jugando el campo con un viento poco habitual, más del norte, que pega de cola en el hoyo 11, así que los jugadores van a tener un poco más de respiro. Eso sí, las rondas de práctica se han jugado desde atrás del todo. Lo uno por lo otro. Álvaro Quirós, que va largo, pegaba ayer drive de primero, madera 3 de segundo y se quedaba a unos sesenta metros del green. Sea como sea, el parte anuncia viento del norte o noroeste toda la semana, así que quizá por primera vez el 11 del Himmerland Golf pueda ser derrotado por la media de golpes de todos los jugadores. Buen momento para arreglar estas cuentas pendientes.
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Tenemos allí esta semana a 13 españoles, dispuestos a conseguir para la Armada el primer triunfo en esta cita: Adrián Otaegui, Sebas García Rodríguez, Pep Anglés, Alejandro Cañizares, Carlos Pigem, Alejandro del Rey, que gracias a una invitación prolonga su ‘aventura’ de este año en el circuito europeo, Pablo Larrazábal, Jorge Campillo, Nacho Elvira, Adri Arnaus, Eduardo de la Riva, Álvaro Quirós y Gonzalo Fernández Castaño.
Como ya se ha apuntado, Otaegui ha sido hasta la fecha y en conjunto el mejor de todos los españoles en este torneo, pues atesora un tercer puesto en 2016, un décimo en 2018 y un 16º en 2019, que fue la última edición, pues no se jugó el año pasado por la pandemia.
