– Sergio García (-2) sigue en la buena senda, la que le llevaba al triunfo hace dos semanas en Holanda. Birdie arriba o abajo, golpe de más o de menos, un putt que no quería entrar, aquel tripateo traicionero o ese chip que se le quedaba colgando para birdie en el 17… Sea como fuera el caso es que el de Borriol siente que está bien metido en faena y que prevalecen las buenas sensaciones. De hecho, sólo se encuentra a dos golpes del top ten del torneo (está a seis del líder, el noruego Johannessen) y además ha quedado demostrado que el turno vespertino lo ha tenido un poco más difícil, con los greenes muchos más duros, sobre todo en determinadas zonas (así lo han sentido algunos jugadores, entre ellos el propio Sergio), lo que ayudaba a crear cierto desconcierto a la hora de planear los golpes.
Otaegui, Jiménez, De la Riva… la Armada sigue de fiesta en Madrid
Cierto es que el chaqueta verde pasaba por el hoyo 8 con un prometedor parcial de -3, pero esos últimos diez hoyos sin birdies no han dejado un mal poso, tal y como se deduce de sus declaraciones posteriores a la vuelta, así como de su rostro relajado. Se siente seguro y mañana, en sesión matutina, va a ir a por todas.
– El registro de 63 golpes del noruego Johannessen, por cierto, es récord del campo. No ha empezado muy mal el baile, por lo que se ve…
Venían tres españoles lanzados, dándose el relevo y copando el liderato (qué fácil es decirlo)
– Samuel del Val (-4) ha protagonizado una de esas historias extrañas del golf, pero a la vez absolutamente domésticas, del día a día. Al vasco no le entraba el campo por el ojo. No es que el Club de Campo le parezca un mal campo, más bien todo lo contrario (“es un campo muy justo, donde prima tener la bola en calle”, señalaba), pero durante las vueltas de práctica no se veía realmente haciendo un resultado muy bajo. Pues bien, quizá precisamente por esa falta de expectativas, terminaba firmando hoy un 67…
Una parada en boxes clave para poner a punto de nuevo el bólido
– Un total de 5.253 espectadores se han dado cita en el recorrido madrileño para seguir la primera jornada, una cifra más que estimable tratándose de un jueves. Lo cierto es que, bien durante la mañana, siguiendo el partido de Rahm, Cabrera Bello y Arnaus, así como por la tarde, en la zona del campo por la que transitaban Jiménez y García, el colorido y hasta los rugidos han sido notables.
Rafa salva esos cinco momentos cruciales que definen el signo de una vuelta
– Hay que consignar la presencia de Jordi García Pinto entre el grupo de árbitros del European Tour presente en este Open de España. Una vez dejó de lado la práctica del golf de alto nivel (ahora juega más bien poco, aunque sus resultados en vueltas de puro entretenimiento están siendo curiosamente bastante buenas), estuvo trabajando en un bufete de abogados, donde ha sacado en limpio una enriquecedora experiencia profesional, pero no pudo resistirse a la tentación de volver al golf, aunque sea desde otro ángulo, cuando se ha presentado la ocasión. Y se lo va a tomar muy en serio, puesto que en unos meses debe pasar un duro examen teórico en St. Andrews y piensa prepararlo al ciento por ciento.
Un novato con un libreto de lujo en el bolsillo
– El jugador del Real Madrid, Gareth Bale, ha estado siguiendo el partido de Sergio García casi enterito. Es bien conocida su afición al golf, así como la buena relación que guarda con el de Borriol.
Bola Provisional: el nuevo podcast semanal de Ten Golf
– Pedro Oriol (-1) cerraba una interesante vuelta por debajo del par en el turno de tarde, aunque su resultado final de 70 golpes no haya hecho plena justicia al juego del madrileño, que realmente ha pegado muy buenos golpes.
