El Royal & Ancient ha decidido reducir el número de participantes del British Open.
O al menos controlarlo para que no se dispare a las cifras del año pasado en Royal Lytham & St Annes. En 2012 se clasificaron 161 jugadores, aunque finalmente acudieron 156 porque se produjeron algunas bajas de última hora. Estos números preocupan y para evitar una situación incontrolable en Muirfield se han tomado cartas en el asunto endureciendo los criterios de clasificación.
Hay seis grandes perjudicados con la nueva normativa. El primero es el Open de Francia. Ya no habrá plaza para el British a través del torneo que se disputa en el Golf Nationale de París. Antes, el mejor jugador que acabara en la capital gala entre los cinco primeros y no estuviera clasificado anteriormente lograba el billete. Ahora, cero.
En el Open de Escocia sucederá algo parecido, aunque algo menos radical. Hay una puerta abierta. El criterio hasta este año era el mismo que el del Open de Francia. Sin embargo, esta vez sólo se clasificará el ganador, siempre y cuando, claro, no estuviera ya metido en el British.
Lo mismo se aplica a los torneos que coinciden en el tiempo con Francia y Escocia, pero al otro lado del Atlántico. Del Greenbrier Classic ya no se clasificará nadie y del John Deere sólo el ganador.
También se pierde una plaza en la previa internacional europea, la que cada año se celebra en Sunningdale. De los diez que se clasificaban hasta ahora pasarán a nueve.
Por último, pierde fuerza el circuito japonés. Hasta ahora se clasificaban los dos mejores de la lista de ganancias que no estuvieran metidos por otro criterio. Este año sólo podrán hacerlo los dos primeros.
El British Open confía en que los torneos afectados no se resientan, aunque parece inevitable que noten algo.
Muirfield acogerá el British por decimosexta vez. El recorrido escocés se ha alargado unas 160 yardas respecto a la última vez que se jugó allí y que ganó Ernie Els. El cambio más significativo se ha producido en el hoyo 9, que se ha alargado unos 45 metros utilizando parte de la finca del campo vecino, el Renaissance Club.
Se anunciaron otras novedades. Se permitirá igual que el año pasado la utilización del móvil por parte del público y, además, se instalarán zonas de conexión wi-fi. Por otro lado, el British se moderniza y colcará algunas clasificaciones portátiles LED para que los aficionados puedan seguir los resultados en vivo.
