Andaluza, malagueña y amateur. Ana Peláez (-7) ha escrito hoy con letras de oro su nombre en la historia del Andalucía Costa del Sol Open de España. Ha terminado en la tercera plaza en solitario. Es el mejor puesto cosechado por una amateur española en el Open nacional en todos los tiempos. Supera a Carlota Ciganda. Y eso, señoras y señores, son palabras mayores. Deja un récord que no será fácil de batir.
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Lo ha hecho, además, con toda la presión sobre sus espaldas. No era fácil salir hoy en Guadalmina, en los últimos partidos, con alguna opción de ganar y jugando, además, junto a Azahara Muñoz, paisana, referente e ídolo absoluto de Ana. Ha sabido lidiar con los nervios y la tensión y entregar una tarjeta espectacular de 67 golpes, con seis birdies y un solitario bogey. Sólo ha hecho dos bogeys en los últimos 36 hoyos. Solidez, consistencia y una enorme determinación. «Me encanta mirar las tablas de resultados y ver mi nombre ahí arriba. Es lo que más me gusta. He empezado con muchos nervios. En el hoyo 1 iba a salir con la madera 3 y he cambiado al driver porque estaba muy tensa, casi temblando. Han sido unos nervios a los que nunca me había enfrentado y me hace muy feliz que haya salido tan bien», asegura.
La apoteosis de Ana Peláez
Ana se marcha de Guadalmina convencida de que está ya al nivel del golf profesional. Es más, ella se siente una más, aunque en su ‘carné’ de golfista ponga aún que es amateur. Licenciada en Finanzas y Cadena de Suministros por la Universidad de Carolina del Sur, ha decidido estudiar un semestre más allí, cogiendo algunas asignaturas sueltas para completar su formación. El escaso calendario del que iba a disfrutar como pro al no haber escuelas en Estados Unidos y Europa este año es lo que le ha empujado a tomar esta decisión. No es amiga de perder el tiempo. Si no puede jugar torneos, estudia. Cabeza bien amueblada y muchas ganas de que llegue el próximo año y pasarse a pro.
Su actuación no ha pasado desapercibida a nadie. Azahara Muñoz le augura un futuro brillante si sigue trabajando en esta línea. «La he visto muy bien hoy. Ha jugado muy sólida, ha pegado muy buenos golpes, me ha gustado mucho. No me gusta hablar del futuro porque nadie sabe lo que puede pasar, pero si sigue así no tengo dudas de que le va a ir muy bien», aseguraba la golfista de San Pedro de Alcántara.
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Los elogios, obviamente, son de ida y vuelta. «Jugar con Azahara y poder hacerlo tan bien ha sido algo impresionante. Podría pedir más, ganar el torneo por ejemplo, pero realmente no puedo pedir mucho más. Lo que más me ha llamado la atención de Azahara ha sido su tranquilidad, la calma con la que se maneja en el campo ya sea cuando le van bien la cosas o cuando le van mal», remata.
