Cayetana Fernández (-12) ya ha cumplido con el objetivo que se marcó antes de empezar el Andalucía Costa del Sol Open de España. La golfista madrileña de 17 años venía a Alferini con el deseo y la ilusión de jugar al menos una vuelta con Carlota Ciganda (-11). Pues bien, no sólo lo ha conseguido, sino que será el domingo peleando por la victoria. No hay sueño pequeño cuando el corazón es grande. Y a Cata se le sale del pecho.
Cayetana y Carlota compartirán con Carla Tejedo (-9) el penúltimo partido del día en Benahavís. Han quedado para salir de caza. La presa es el liderato. Ahora mismo está en -14, en poder de Morgane Metraux, la suiza que viaja en jet privado, tiene entrenador particular desde que aprendió a coger un palo y juega al golf como los ángeles. Viene de mantener la tarjeta del LPGA Tour con un cuarto puesto en el Pelican Women’s Championship de Florida y ya ha ganado este año. Hueso duro de roer. Empatadas con Cayetana están Caroline Hedwall (-12) y Leona Maguire (-12), dos golfistas que perfectamente podrían ser gladiadoras en un circo romano. Qué manera de exprimir hasta la última gota de su golf.
Cayetana sigue devorando sueños a mansalva en este Open de España. Hoy le tocaba jugar con Linn Grant (-9) y Leona Maguire en el partido estelar. Casi nada. Probablemente son las mejores jugadoras de Europa en estos momentos. La sueca es la Número 27 del ranking mundial y Leona está situada en la undécima posición. Algo más que una prueba de fuego. El balance es que ha ganado a Grant y ha conseguido mirar a los ojos a Leona, una jugadora que rompió el molde de la competición cuando nació. Sin jugar bien, sin desplegar su mejor golf, sin tan siquiera patear a su nivel habitual, se ha hecho tres bajo par hoy y saldrá este domingo en el partido estelar. Es otro nivel.
Cayetana ha superado con una nota muy alta su examen. Y eso que arrancaba con bogey en el hoyo 1 tras colarse de palo en el segundo golpe. El viento, que hoy se ha dejado sentir en Alferini, sin ser un vendaval, le ha jugado una mala pasada. Ese error le costaba la primera mancha en su tarjeta y cedía el liderato en solitario. Son instantes que pueden marcar una vuelta entera y que no ayudan precisamente a templar los nervios.
Sin embargo, Cata ha seguido a lo suyo. Ha sabido resetear con naturalidad y ha empezado a jugar un golf excelente, fallando muy pocos golpes, pegando muy bien al drive y unos hierros sensacionales. En ningún momento se ha dejado impresionar por la situación, ni siquiera bajo la atenta mirada de Suzann Pettersen, la capitana de Europa de la Solheim Cup que ha acompañado el partido los primeros hoyos y ha ido tomando buena nota.
Cayetana ha sacado un gran birdie en el 4, dejando la bola a borde de green en este par 4 corto y firmando un gran putt de unos cinco metros. Después, hacía bogey en el 6. Su segundo golpe terminó en la plataforma de arriba y los dos putts se convirtieron casi en una quimera. Otro error. No pasa nada. No pesó. Birdie al hoyo 8, después de una gran oportunidad en el 7, y dos más en el 10 y 11. Otra vez, líder.
El fallo del día ocurrió en el hoyo 12. Par 3. Mal golpe y al agua. Doble bogey. Otro momento crucial. De nuevo asomaba el fantasma de la presión, del miedo, del hasta aquí hemos llegado. Apareció en los que esto escriben y, seguramente, en una buena parte de los que seguían el partido, porque Cata ni se inmutó. Siguió a lo suyo. Opción de birdie en el 13 y 14 que no convirtió, bogey en el 15 y birdie que se escapa en el 16, par 5. De pronto, el liderato se había ido a tres golpes…
¿Quizá se le estaba haciendo larga la vuelta? Ja. Respuesta de ganadora. Birdie en el hoyo 17 tras pegar un golpe estratosférico, a más de 190 metros de la bandera y con la madera 5. Pasó muy cerca del albatros y se dejó una gran opción de eagle que no pudo meter. Birdie fácil. Piezas encajadas de nuevo. Y el remate vino en el hoyo 18. Gran tiro por el lado más peligroso de la bandera, entre el agua y el agujero, opción de birdie de unos siete metros y para dentro… Sacó el puño. Qué puño. Qué garra. Un putt y un puño para cumplir otro sueño. Y mañana toca otro: ¿ganar? «Ese es el objetivo que tengo».
En el duelo por la Race to Costa del Sol, Linn Grant (-9) sigue mandando por delante de Maja Stark (-8), pero la diferencia es tan pequeña que aún puede ocurrir de todo.
