A Martin Kaymer le da algo de reparo referirse a sí mismo como jugador local en este LIV Golf Andalucía. «Al fin y al cabo soy alemán, sigo siendo un invitado por aquí, aunque juegue mucho en Valderrama», asegura a Ten Golf. Sea como fuere, la realidad es que ninguno de los golfistas que juegan esta semana en Sotogrande tiene una casa más cerca del coliseo de Robert Trent Jones. A unos minutos. La adquirió el año pasado y vivió aquí unos cinco meses en invierno. No se considerará un jugador local, pero el alemán se ha adaptado al medio como un guante.
«La vida en España está siendo muy positiva, gente muy acogedora. Álvaro Quirós y su mujer María nos han ayudado mucho a entender mejor este sitio, para ir a restaurantes, con nuestros hijos en la escuela, a sentirnos parte de esta comunidad. Han sido muy agradables», asegura el teutón que ha encontrado en esta parte de la provincia de Cádiz un lugar ideal, aunque admite la existencia de un obstáculo para mudarse definitivamente a España. «La energía aquí es muy positiva, nos gusta mucho vivir en este lugar. Nos gustaría mudarnos aquí algún día, pero para ser sincero no va a ser fácil por el tema de impuestos», explica.
Desde luego, las razones para comprarse una casa en España y, más concretamente en Sotogrande, son rotundas. «Siempre hemos tenido la base en América, pero entre cualquier sitio de América y Sotogrande, siempre elegiríamos Sotogrande. Esto es más como somos nosotros. La gente aquí es muy auténtica, nos sentimos más parte de aquí y Alemania está a sólo dos y horas y media de vuelo. Puedo ir a casa rápido, los amigos pueden venir aquí a pasar el fin de semana… Eso no lo podía hacer en Florida. He sentido una energía muy buena aquí, es un sitio muy auténtico», afirma.
Esa energía positiva de Sotogrande envuelve también su golf a día de hoy. Sus resultados han mejorado mucho este año y da la sensación de que el mejor Kaymer está a la vuelta de la esquina. El alemán es optimista, pero prudente. No se esconde y explica qué cree que le falta para volver a su mejor nivel. «Diría que estoy a un 80 por ciento de mi mejor versión. Aún necesitó trabajar en algunas cosas, pero estoy muy cerca. Estoy esperando a los grandes resultados. Tengo que ser paciente, pero al mismo tiempo debo estar preparado mentalmente para tener éxito de nuevo. Llevo mucho tiempo, tres, cuatro años, sin tener éxito, jugando sin opciones de victoria y cuando me vuelva a poner, tengo que estar preparado para terminar el trabajo, cerrar el torneo. Creo que es algo más mental, también algunos golpes, pero sobre todo es acostumbrarme a jugar un buen golf otra vez», afirma.
En cuanto a su juego, concretando, Kaymer tiene claro dónde debe afinar. «Mis hierros están bien, mi drive es bueno, tengo que mejorar mi juego corto. Me he dejado algunos golpes alrededor de green y en los greenes y necesito arreglar eso para tener más opciones en el futuro». Esta semana será una buena prueba de fuego. Los greenes de Valderrama se están poniendo cada vez más duros y el rough alrededor de green está potente.
Por supuesto, la Ryder Cup siempre está en el horizonte de Kaymer. Ninguna competición le llena como la Ryder, ya sea como jugador o como capitán. «La Ryder Cup es siempre el último gran objetivo, volver a esa competición. No sé si jugarla, pero sólo el hecho de tener la oportunidad de poder clasificarme, sería algo muy bueno. La Ryder Cup es el mejor momento de mi carrera y si algún día la Ryder se juega en Alemania y yo pudiera ser el capitán, sería algo increíble. Pero me temo que aún quedan muchas cosas que se tienen que resolver para llegar a eso», señala.
«Ojalá Álvaro Quirós encuentre la manera de jugar al golf al nivel que él sabe y puede»
Martin Kaymer, sobre Álvaro Quirós
Kaymer desea que su retorno, cada vez más próximo, no sea el único de un jugador de la ‘zona’. Cuando se le pregunta por Álvaro Quirós lo tiene claro. «Hablo mucho con Álvaro. Hace un par de meses jugamos aquí los pares 3 y estuvimos hablando de nuestras carreras, las cosas en las que estamos trabajando y cómo podríamos llegar de nuevo a nuestro nivel. Álvaro entiende muy bien el juego del golf, pero al mismo tiempo se pone mucha presión. Está jugando muy buen golf, pero necesita hacerlo en los torneos. Deseo que encuentre la manera de jugar al golf de la manera que él sabe y puede. Somos amigos desde hace casi 20 años, coincidimos en las competiciones amateurs. Yo esperaba que tuviera una carrera aún mejor, seguro que él esperaba lo mismo, pero muchas veces tú tienes que dar un paso hacia atrás para ir después adelante. No sé lo que tiene que hacer, sólo él lo sabe, pero ojalá encuentre la manera para jugar al nivel que él puede».
