Hay lugares con embrujo, campos con un misterio especial para un jugador, recorridos que entran por los ojos del golfista y donde siempre rinde a un gran nivel. Esa fascinación, esa química, existe entre Sergio García (-17) y Singapur. En Sentosa, el precioso resort donde se encuentra el Serapong Course, el español podría empadronarse porque sus resultados están a la altura cada vez que pisa aquel sitio. Esta vez, la magia, esa atmósfera perfecta, le dio al castellonense para palpar con la yema de los dedos su primer triunfo en LIV Golf, pero se hubo de conformar con caer en el desempate con las botas puestas ante un Talor Gooch que ha encadenado su segundo triunfo consecutivo tras su alegría en Adelaida.
Nerves of steel! @thesergiogarcia sinks this clutch birdie putt to force a playoff with @talorgooch#LIVGolf @fireballsgc_ pic.twitter.com/WLJJFysNAG
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Los números no engañan. Al menos en esta ocasión. Cuatro apariciones de García en la ciudad-estado asiática y nunca (15 vueltas en total) bajó de 71 golpes en ninguna de las rondas. Venció en 2018 con -14. Fue séptimo en 2019 con -8. Y undécimo concluyó en 2017 con -5. Este domingo, con 18 hoyos menos que en las tres visitas previas, firmó un total de 17 menos (-4 en la ronda), pero se quedó a las barbas, nunca mejor dicho pues su tercer golpe desde el bunker en el primer hoyo del playoff ahí quedó, de estrenar su casillero de victorias en la gira saudí después de 938 días sin saborear las mieles del éxito. Al menos ha demostrado en Singapur que tiene mucho golf en sus manos y que en cualquier momento rompe la racha.
Las apreturas, la igualdad, duraron la ronda completa en un gran mano a mano entre las dos G (García y Gooch) con Brooks Koepka (-16) animando el cotarro. Iba la cosa camino de dirimirse entre esta terna, pero quizás pudo decantarse la balanza para el español si después de la suspensión por tormentas eléctricas hubiera embocado un putt de cuatro metros en el 14 para birdie. Se le fue por abajo y habría deshecho el empate con Gooch. Debió afectarle al ganador del Masters de 2017 y en la salida del 15, con hierro, se fue muy a la derecha, entre árboles y con mal ángulo. No alcanzó el green ni anotó luego el putt de par. Cayó a -15 y quedaba la puerta abierta para su rival.
Back-to-back! 🏆🏆
Talor Gooch wins in Singapore to become our first back-to-back winner 👏#LIVgolf @rangegoatsgc pic.twitter.com/7Hu6Fvr24n
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Sin embargo, reaccionó de inmediato al jugar de manual el 16. Calle, hierrazo a dos metros y birdie. Tablas de nuevo. Desaprovecharon ambos los buenos tiros en el 17 y lograron sendos birdies en el 18 (gran putt de Sergio de casi tres metros con mucha presión). Pero el embrujo se disipó en el desempate. El español repitió desde el tee con la madera y se fue directo al bunker, mientras Gooch la dejaba de dos en el green después de disfrutar de la enorme fortuna de no irse al agua por medio metro en la salida. A la sacada de la arena del castellonense le faltó un metro para ser perfecta, pero se enredó en la hierba alta que protege el obstáculo y abrió de par en par la victoria, segunda seguida, al estadounidense.
Hubo más protagonismo español en el cierre singapurense. Eugenio López Chacarra (-9), mohíno en los últimos torneos, emergió con la segunda mejor vuelta del día. Siete menos con un eagle espectacular, siete birdies y un par de errores. El joven madrileño, ganador en Bangkok en 2022, escaló muchas posiciones para terminar decimotercero. David Puig (-3), en cambio, tuvo una vuelta ramplona con dos birdies y dos pares, bajando en la clasificación hasta la posición 35ª.
Los RangeGoats (-37) capitaneados por Bubba Watson, y el hombre de moda, Gooch, birlaron la victoria a los Fireballs (-34) de Sergio y Chacarra, que comandaban por un golpe de ventaja la tabla por equipos antes de la suspensión.
