Ana Peláez, Marta Pérez, Paz Marfá, María Herráez, Teresa Díez, Teresa Toscano, Elena Hualde y Clara Moyano empiezan este jueves su participación en la Escuela del LPGA Tour. Hoy arranca la primera fase de este largo proceso cuyo gran objetivo final es conseguir la tarjeta del circuito americano. Es uno de los exámenes más difíciles que existen en el golf profesional. Deberán superar tres fases compitiendo contra más de 500 jugadoras. Un mayúsculo desafío que pone a prueba cuerpo y mente.
Primera fase de la Escuela del LPGA Tour en tres campos con un corte después de 54 hoyos
Esta primera fase se disputa en California, en los recorridos Dinah Shore y Pete Dye de Mission Hills y el Marriott’s Shadow Ridge Golf Club, a escasos kilómetros de Palm Desert. Son cuatro días de competición con un corte después de la tercera jornada, una vez todas las jugadoras haya pasado por los tres campos. Pasan a la última ronda un mínimo de 125 golfistas y empatadas, aunque se completará hasta 156 si no se alcanza esa cifra. Pasan a la segunda fase un mínimo de 95 y empatadas después del cuarto día. Compiten 339 jugadoras, por lo que el gran objetivo, la gran criba es superar el corte de la tercera jornada.
Junto a las siete españolas se encuentra Marcelo Prieto, entrenador enviado por parte de la Real Federación Española de Golf para prestar todo el apoyo que necesiten a las jugadoras. «Hace mucho calor, rozando los 40 grados, aunque el LPGA ha permitido a las chicas jugar en buggie, por lo que será más llevadero. Están todas muy tranquilas y convencidas de conseguir el objetivo de pasar a la siguiente fase. El campo más técnico y estrecho es el de Pete Dye, se complica un poco más desde el tee, pero en general son recorridos abiertos, el rough no es demasiado penalizador y los greenes están un poco lentos, algo lógico porque deben protegerlos del calor», explica Prieto a Ten Golf desde California.
Ocho españolas entre las 339 participantes
En estos momentos, tenemos a dos españolas con tarjeta completa del LPGA Tour: Carlota Ciganda y Azahara Muñoz. Además, Luna Sobrón y Nuria Iturrioz tienen una tarjeta condicionada. En el Symetra Tour tenemos compitiendo cada semana a Fátima Fernández Cano, que lo tiene bien encaminado, María Parra y Marta Sanz para lograr el acceso mediante este canal (diez primeras del ranking al acabar el curso) y la Escuela es la siguiente vía para sumar más jugadoras españolas en el Olimpo del golf mundial. El objetivo de la Federación a medio plazo es tener el mayor número de golfistas españolas en el LPGA, con una cifra mínima que esté entre las cuatro y cinco jugadoras. El camino para lograrlo comienza hoy en California con ocho españolas en liza.
