No deja indiferente. Charley Hull es una figura dentro y fuera del campo de golf. Se le resiste su primer Major, acumula tres segundos puestos y un tercero. Campeona de seis títulos como profesional, una habitual de la Solheim Cup y esta semana en Lancaster ha brillado para finalmente terminar entre las veinte mejores del US Women’s Open.
Es innegable que la inglesa es uno de las grandes figuras del golf femenino mundial. Siempre da que hablar y su personalidad crece y crece cada vez más en el circuito. Sin embargo, algo sucedido más allá de las cuerdas le ha hecho ser la gran protagonista de la semana. Probablemente haya sido una de las historias más virales del torneo.
Nos ubicamos en el campo de prácticas de Lancaster. Allí Charley fue inmortalizada fumando mientras le firmaba un autógrafo a un niño que se lo acababa de pedir. El vídeo se hizo viral y corrió por redes como la pólvora: “Es divertido, estaba fumando en el campo de prácticas y tenía las manos ocupadas, me pidieron un autógrafo y no voy a decir que no, me puse el cigarro en la boca, firmé y se hizo viral».
En apenas dos días el fenómeno Hull le ha hecho crecer más de 70.000 seguidores en redes sociales, sus patrocinadores se frotan las manos. No es la primera vez que se le ve fumando, ni mucho menos, pero el hecho de hacerlo mientras firmaba autógrafos hizo el deleite de los fans. La John Daly del golf femenino algunos ya la apodan: «Ha sido una locura, los fans han gritado mi nombre durante toda la semana. Ha sido una semana salvaje, muy guay, ojalá sea así más a menudo”.
«Mi padre fuma 40 cigarros al día desde que tenía 12 años y ahora tiene 75, y mi sobrino fuma, que tiene como 25 años. Toda mi familia fuma, así que no es algo que me haya parecido raro», pero reconoce que en el fondo no le gusta, «odio fumar. Solía maldecir a mi padre cuando era más joven por fumar, pero creo que fumo cuando estoy estresada… Pero escucha, lo dejaré pronto. La cuestión es decidir el cuando».
Las anécdotas divertidas de la semana no terminan ahí. Hull contó ayer su ‘no cita’ de la semana. Un aficionado intentó conseguir un encuentro con la inglesa: «Un fan me dijo se me había caído algo y me dio en la mano un trozo de papel con su número de teléfono. Me dijo aquí está mi número, envíame un mensaje para que podamos averiguar dónde te llevo a cenar esta noche. Obviamente no le llamé», contaba entre risas la campeona de dos títulos en el LPGA.
«Literalmente, todos mis amigos siempre dicen que debería tener un programa de televisión con lo que pasa en mi vida», dijo Hull. «Si crees que tengo mucha personalidad en el campo de golf, deberías ver cómo es mi vida en casa». El fenómeno Hull no deja indiferente, eso está claro.
