Jon Rahm no tenía programada una rueda de prensa oficial esta semana en el Genesis Invitational, sin embargo los medios americanos aprovecharon la jornada de Pro Am para ‘cazarlo’ al vuelo y preguntarle por la Super League. Ahora sí, el golfista de Barrika cierra definitivamente las puertas a la Super League y le pone veinte candados. Tan o más contundente que Rory McIlroy. Jon declara su amor eterno al PGA Tour.
«Quiero aprovechar este momento para hablar de esto por primera y última vez. Declaro oficialmente mi lealtad al PGA Tour. Soy miembros del comité de jugadores del PGA Tour y tengo una fe enorme en Jay Monahan y el producto PGA Tour», explicó Rahm.
El jugador español lo puede decir más alto, pero no más claro. «Se hablado mucho sobre la Super League y hay muchísimas especulaciones. Creo que ese proyecto no es lo mejor para mí y mi futuro en el golf. Creo que el mejor legado que puedo dejar en este deporte es a través del PGA Tour», apuntó.
Como Número 1 del mundo Jon ha sido y es uno de los grandes objetivos de la Super League, aunque el golfista vizcaíno asegura que su intención jamás ha sido moverse, ya que sus objetivos vitales a día de hoy van mucho más allá del dinero. «Yo no juego al golf por dinero y el dinero es el único atractivo que le veo al proyecto saudí. Ellos ponen cifras encima de la mesa con la intención de impresionar a la gente. Yo estoy aquí por el amor que siento por el golf y para ser un campeón», matizó.
Rahm no termina de darle credibilidad al proyecto por la cantidad de esquinas oscuras que tiene. «Se escucha que hay jugadores que han firmado acuerdos de confidencialidad, que se han comprometido… Yo estoy al margen de todo eso. Le dije a mis agentes no me volvieran a molestar con este tema salvo cuando haya algo real, un proyecto de verdad con todos los detalles sobre la mesa… Aún estoy esperando. Lo único que se oye es que «oh, a Bryson le ofrecen 135 millones de dólares» y esas cosas… No me interesa. He ganado en mi vida más dinero del que jamás pensé que conseguiría. Eso no me atrae», sentencia.
Jon respeta a los jugadores que quieran involucrarse en el nuevo proyecto de la Super Leage, pero deja claro que no cuenten con él. «Todo el mundo es libre de elegir el camino que quiera. Así de simple. Lo único que digo es que para los jugadores jóvenes que tienen toda la vida y la carrera por delante irse a la Super League no me parecería lo más inteligente. Insisto: el único atractivo es el dinero. Yo creo que en el PGA Tour jugamos por mucho más que dinero. Hay historia, hay legado. Yo juego para ganar torneos y jugar contra los mejores del mundo», recalcó.
Por último, es partidario de que aquellos que decidan marchar a la Super League no puedan jugar en el PGA Tour. «Yo no soy el que toma estas decisiones, pero si saltas del barco y te marchas a otro proyecto, entiendo que no se le debería permitir jugar en el PGA Tour». Taxativo.
Rahm, de este modo, disipa cualquier duda que pudiera existir. Todo al PGA Tour.
