Gonzalo Fernández Castaño inició hace tres semanas un duro maratón de torneos con un único objetivo, poner la temporada en el disparadero de salida y sumar los dólares necesarios para mantener la tarjeta del PGA Tour. La maratón llega esta semana a su ecuador (son seis torneos consecutivos) y lo hace en Memphis, después de quedarse muy cerquita de la clasificación para el US Open y conseguir hace apenas dos semanas el mejor resultado de la temporada.
Gonzalo quiere darle otro arreón a su cuenta de puntos FedEx y no hay mejor sitio para hacerlo que, precisamente, el FedEx St. Jude Classic. Se juega en el TPC Southwind, un campo que no le trae malos recuerdos a Gonzalo. Aquí pasó el corte el año pasado y firmó un top 50. Ahora confía en mejorar aquella actuación.
Además de Gonzalo, Memphis nos trae el aperitivo del US Open. No va más. Es la semana previa. Quien quiera afilar sus armas no tendrá ya más oportunidades. En Memphis veremos a Phil Mickelson y su lucha desesperada por alcanzar su mejor versión justo antes del grande que tanto se le resiste y que ya debería estar en su bolsillo. También estarán Dustin Johnson, siempre candidato cuando se acerca un major, o Billy Horschel. No podía faltar el campeón de la FedEx en el torneo que lleva el nombre del gran patrocinador.
La diferencia horaria entre Memphis y la España peninsular es de siete horas. Gonzalo saldrá a partir de las 20.20, junto a dos europeos, Jamie Donaldson y Graeme McDowell.
