Ocho jugadores del PGA Tour, incluido el nº 2 del ranking mundial de golf, Dustin Johnson, habrían solicitado permiso al circuito para disputar el Saudi International, tal y como avanza Golfweek en Estados Unidos. Una petición que choca frontalmente con las comunicaciones realizadas previamente por la gira estadounidense, en las que afirmaba que negaría las exenciones para que sus miembros pudieran participar en este controvertido evento.
Los jugadores del PGA Tour deben obtener una autorización para competir en otros circuitos. Y tal y como uno de los portavoces de la gira le ha señalado a dicha publicación, la decisión sobre estas solicitudes de exención pueden aplazarse hasta 30 días antes del evento en cuestión. El Saudi International está programado del 3 al 6 de febrero en el Royal Greens Golf and Country Club de la Ciudad Económica King Abdullah, así que los jugadores podrían no saber si se les permite jugar hasta el martes 4 de enero.
Quienes decidieran participar en el torneo sin contar con el permiso del PGA Tour se enfrentarían a procedimientos disciplinarios que se resolverían, probablemente, en forma de multa. «Hemos solicitado una exención y no sabemos cuándo tendremos noticias, pero escuché verbalmente que el PGA Tour todavía está considerando su respuesta», confirmó David Winkle, agente de Dustin Johnson.
El Saudi International está en el centro de la batalla por el futuro del golf profesional ya que tanto el PGA Tour como el European Tour tratan de defenderse de la propuesta conocida como Super League Golf, que cuenta con financiación saudí. Este proyecto ha estado cortejando a las grandes estrellas mundiales de golf con premios más suculentos, superiores a los 30 millones de dólares en algunos casos. Por el momento, ningún jugador se ha comprometido a jugarlo.
Jay Monahan, comisionado del PGA Tour, fue muy duro al respecto asegurando que cualquier miembro del circuito estadounidense que se comprometiera a participar en esta super liga saudí sería suspendido de por vida. Es público y notorio que varios jugadores han coqueteado con esta posibilidad. Mientras golfistas como Jon Rahm, Número 1 del mundo, o Rory McIlroy lo han rechazado públicamente.
El Saudi International del próximo mes de febrero contará con una bolsa de premios de cinco millones de dólares, una cantidad muy inferior a la que ofrecen los torneos regulares del PGA Tour. Pero los saudíes suelen tentar a las grandes estrellas para que lo disputen ofreciéndoles jugosas cantidades sólo por jugar y alquilando vuelos privados para sus traslados. Entre los golfistas que han cobrado por disputarlo en alguna ocasión se encuentran Phil Mickelson, Bryson DeChambeau o Brooks Koepka.
Golfweek ha facilitado la lista de jugadores que han pedido permiso para jugar en Arabia Saudita en febrero en la que, además de Dustin Johnson, aparecen Graeme McDowell, Abraham Ancer, Lee Westwood, Tommy Fleetwood, Henrik Stenson, Kevin Na y Jason Kokrak. La mujer de Fleetwood, que es su agente, confirmó también esta petición, aunque aún no sabe si disputaría el evento en caso de obtenerla.
Un representante habría informado también a la publicación estadounidense de los acuerdos privados que habrían firmado varios jugadores con el Saudi International, de varios años de duración, que se verían seriamente comprometidos si el PGA Tour les niega la exención para participar. En las tres primeras ediciones del torneo, cuando fue cosancionado por el European Tour, la gira estadounidense sí permitió a sus golfistas participar. Pero tras la alianza estratégica para frenar el avanza de esta Super League Golf las cosas han cambiado radicalmente…
El Saudi International de este próximo año se celebrará dentro del Asian Tour, circuito en el que los saudíes invirtieron 100 millones de dólares tras no conseguir el apoyo europeo a su super liga. «Es un tema complejo para el Tour», reconoció Winkle, agente de DJ. «No sé cómo tienen que ver esto internamente, pero Dustin ha pasado más de tres años y fue primero, segundo, primero y puso el golf en el mapa en una nueva parte del mundo. Se ganó el derecho a defender su título. No creo que nadie gane en esa situación».
