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Así se gestó y esto supone su victoria en el ZOZO Championship de Japón

La vuelta a los orígenes de Morikawa y sus dos horas y media en el putting green

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Collin Morikawa © PGA Tour
Collin Morikawa © PGA Tour

Collin Morikawa puso fin este pasado fin de semana a dos años sin títulos. Y lo hizo en un lugar muy especial para él, en el ZOZO Championship de Chiba, en Japón, país del que proceden los antepasados de su padre. Una herencia familiar que significó mucho para el golfista californiano, quien no dudó en identificarse a sí mismo como un «japonés más» en la emotiva conferencia de prensa posterior a su sexto título del PGA Tour.

«Hay algunos torneos destacados en mi agenda y este era uno de ellos. Ya sea en Los Ángeles, en el Genesis de Tiger, o en el ZOZO, a veces tienes algo que mirar hacia atrás, ¿verdad? Siendo medio japonés, poder conectar aquí con la gente significa un mundo para mí. Cuando eres capaz de tocar esa fibra, a veces ves que tira un poco más de ti. Como cuando representas a Estados Unidos en la Ryder o en los Juegos Olímpicos. Es algo que te impulsa», dijo.

«A principios de semana sabía que los aficionados locales estarían, obviamente, apoyando a los jugadores japoneses. Pero a mí me gusta contarme como un japonés aparte, así que sentí ese cariño. La gente ha sido increíble conmigo y espero volver muchas veces más. Ganar siempre significa mucho, pero ganar en Japón, que mi herencia familiar sea mitad japonesa y mi apellido Morikawa, es tan especial… Hay unos pocos sitios donde al final de tu carrera tienes el sueño de haber podido ganar. No es fácil, jugamos mucho en Estados Unidos, así que cuando hay oportunidad de salir fuera a un país que me encanta y por el que siento respeto, con toda su historia, es especial. Pensaba que podía haber ganado aquí el oro en los Juegos. Pero mira, hoy va a ser muy especial, no sólo por poner fin a dos años de sequía sin títulos, sino porque ahora puedo tachar de mi lista de deseos el sueño de ganar en Japón. Ya lo he hecho y espero poder hacerlo muchos más años», insistió Collin.

Para el jugador de Los Ángeles, de 26 años de edad, estos dos años sin ganar se han hecho largos, pero nunca le han hecho dudar de su valía: «No sentía dudas, no es que no creyera que no iba a conseguir otra victoria, sino que simplemente no sabía cuándo iba a llegar. La incógnita era más en el cuándo, y esos pensamientos a veces se amontonan en tu cabeza… ¿Qué necesito cambiar? La realidad es que no he cambiado mucho, para ser honesto. Sólo necesitaba dar un par de pasos hacia atrás, volver al origen, para entender lo que me hizo tan sólido en 2019, 2020 y 2021. Lo hice después de los playoffs. A veces basta con entenderlo desde un nivel muy básico. Y creo que es a lo que me apegué esta semana. El putter se ‘calentó’, algo que no pasaba desde hace bastante tiempo, hice buenos golpes con los hierros… Incluso hoy en el hoyo 5 nos paramos porque J.J. (su caddie) me dijo ‘rompiste la racha’, con cuatro birdies seguidos entre ayer y hoy en los pares tres. Ese ha sido mi fuerte».

Un secreto que tal vez tuvo que ver con las dos horas y media que pasó el miércoles en el putting green del Accordia Golf Narashino Country Club, donde Collin y su caddie («un amigo, un mentor, alguien en quien confío, alguien a quien respeto y sin el que no estaría aquí ahora mismo») dieron con la tecla: «Encontramos ‘algo’ y vamos a seguir con ello. Nunca sabes si va a estar bien o mal, pero algo no funcionaba. Algo que no podíamos entender. J.J. y yo nos mirábamos confundidos tratando de entender un montón de cosas. No estábamos cambiando mucho, sólo tratando de ver los putts de una manera distinta. Y nos quedamos con eso, fue fantástico ver cómo funcionó en la primera ronda y así continuamos. He hecho muchos buenos putts esta semana».

Ahora, Morikawa afronta la temporada 2024 jugando el torneo de campeones de Hawai y con otro estado de ánimo: «Los objetivos no cambian, siempre me presento a los torneos regulares y a los majors convencido de que puedo ganar. Pero está bien quitarse esta mala racha de encima, ¿no? Lo comparo con ganar tu primer torneo del PGA Tour, tu primer major.. ¿Cómo continúas luego? ¿Cómo lo aprovechas? Esa es una buena pregunta. Simplemente miro atrás con mi equipo y digo: ¿Qué hemos hecho bien y cómo podemos continuar con esto en el futuro? Los márgenes son estrechos. Hoy gané por un puñado de golpes, pero a veces pierdes por uno sintiéndote igual. Aunque estas semanas hay que capitalizarlas y no dejarlas pasar. Espero que este triunfo sirva como impulso para 2024 y empezar el año con buen pie».