No sabemos si Harold Varner III (-7) podrá ganar el Charles Schwab Challenge de Colonial. Es más, la posibilidad de que lo haga es remota, no porque no sea capaz, ni mucho menos, sino porque está rodeado de los mejores jugadores del mundo. Aguantar el tirón durante cuatro días no es nada sencillo cuando uno mira a diestra y siniestra y se le aparecen Justin Rose (-7), Justin Thomas (-6), Collin Morilawa (-6), Bryson DeChambeau (-5), Jordan Spieth (-5) o Xander Schauffele (-5). Más allá de que siempre conviene esperar la reacción de Rory McIlroy (-2), Brooks Koepka (-2) o el mismo Jon Rahm (-1).
La vida ha vuelto a ser de color de Rose…
Varner III tiene muy difícil ganar esta semana en Colonial, pero lo que ha hecho hoy se acerca mucho a un triunfo. En pleno conflicto racial en Estados Unidos por la muerte de George Floyd a manos de un policía, se encarama al liderato. No podía ser otro. El jugador negro que el PGA Tour ha utilizado como icono en las últimas semanas para clamar contra el racismo y pedir respeto y una reflexión para mejorar como sociedad, se pone al frente del pelotón tras una exhibición de golf. Parece el guión de un cuento.
Un tímido choque de puños en el hoyo 9 y pare usted de contar…
En una encomiable lección de honestidad, el golfista de Ohio de 29 años, ganador en el European Tour pero aún no en el PGA Tour, ha admitido tras la vuelta que en ningún momento ha pensado en George Floyd mientras caían los birdies, ni ha salido al campo con la idea de brindarle un homenaje con una buena ronda. Cuando los protagonistas son sinceros y no hay sobre actuación, el mensaje cala aún más hondo.
Se ve que Jon Rahm no ha perdido el toque con el confinamiento… (VÍDEO)
Varner III podría haber aprovechado el momento para montarse una película grandilocuente, pero se ha limitado a ser sincero. Ya podían aprender algunos políticos y miembros del llamado ‘star system’, dispuestos a hacer demagogia a la menor oportunidad. «El golf es la plataforma mediante la que yo puedo expresarme», ha dicho tras firmar la tarjeta. Y vaya si lo ha hecho. Se volverá a hablar y escribir sobre el racismo, entre otras cosas, gracias a su ronda de hoy. Hay que ponérselo en su haber.
Un dato al alcance únicamente de tres jugadores
Los birdies también sacuden conciencias. Varner III ha hecho siete con un despliegue de golf de tee a green de fábula. Ha cazado los 18 greenes, algo que en los últimos 25 años sólo habían conseguido en la primera ronda en Colonial otros dos jugadores: Kris Blanks y Tiger Woods. Espectacular.
Los otros dos nombres propios de la tarde son Justin Thomas (-6) y Jordan Spieth (-5). El primero suma y sigue. Seis birdies sin fallo y se coloca tercero. Es la séptima vez que abre un torneo con una vuelta de 64 golpes o mejor. La mitad de las seis veces anteriores que lo hizo se llevó el triunfo. Cuidado. Su media de golpes en 2020 es de 68,88. Es uno de los jugadores más en forma del mundo, aunque a veces parezca que le falta el oropel que gastan otros.
Jordan Spieth firma su mejor vuelta en 2020
Lo de Spieth se podría considerar una resurrección. Pequeña, modesta y tímida aún, porque sólo es la primera ronda, pero resurrección al fin y al cabo. Los 65 golpes de hoy es su mejor vuelta de golf en 2020, donde sólo había bajado de 70 en dos ocasiones. Desde luego, hoy ha recordado pateando a su mejor versión, y eso es un paso adelante brutal. Aún así, lleva tanto tiempo con la cabeza metida en el agujero que toca esperar. Hay que remontarse atrás casi dos años para encontrar la última vez que cuadró cuatro buenas vueltas. Veremos si lo consigue en su casa, en Texas, en un campo donde recuerden tiene el mejor acumulado bajo par desde 2013 de largo. Suma -67 con lo de hoy y aventaja al segundo (Kevin Na) en 35 golpes.
