Irrumpió en el circuito con una fuerza inusitada, dispuesto a pulverizar todos los récords de juventud y tomar el testigo de Tiger Woods. Sin embargo, en los últimos tiempos la carrera de Jordan Spieth ha sufrido una importante ralentización.
Situado en el 37º puesto del ranking mundial y en el 67º de la FedEx Cup, el golfista texano afronta esta semana en el Wyndham Championship una nueva oportunidad de empezar a recuperar el terreno perdido. Lo hace en un torneo en el que no juega desde el año 2013, en el que perdió en el playoff ante Patrick Reed, futuro ganador del Masters.
Aquella semana, como recuerdan los analistas de 15th Club, Spieth estuvo a un paso de convertirse en el dos veces ganador del PGA Tour más joven desde el año 1900, con 20 años y 23 días de edad. Después de aquel torneo ganó 10 eventos más del circuito, incluidos tres majors. Aunque, eso sí, de su última victoria han pasado ya más de dos años…
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Y lejos de lo que pudiera parecer, su problema no reside en el putter. Curiosamente, Spieth está pateando mejor esta temporada de lo que lo hizo en 2015. Entonces, acumulaba una estadística de 0,57 golpes ganados por ronda con el putter. Esta temporada, su media de golpes ganados en este apartado del juego es de 0,74.
Jordan, además, está metiendo putts cada vez más largos. Más putts de cuatro a ocho pies, más putts de 10 a 15 pies y más putts de 25 pies o más. Entonces, ¿cuál está siendo su principal problema? Efectivamente, el juego de tee a green y, especialmente los tiros de 100 metros hacia abajo.
En 2015, Jordan estaba mejor posicionado en la clasificación de golpes ganados de tee a green (cuarto) que con el putter (noveno). En 2017, fue el segundo jugador del circuito en golpes ganados aprochando y jugando de tee a green. En su mejor momento, no es que Spieth tuviera un juego consistente y regular. Simplemente, la dejaba muy cerca de las banderas con los hierros desde cualquier parte del campo.
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Esto es, precisamente, lo que Jordan no está haciendo bien este año. Es el 147º del circuito en golpes ganados aprochando, el 183º en golpes ganados desde el tee y el 189º en greenes en regulación. Sólo cinco jugadores del circuito están cazando menos calles que Spieth esta temporada. En 2015, lideró el PGA Tour en golpes de proximidad desde el rough. Este año, está empatado en el puesto 80º en esta estadística.
Por suerte, no todo son malas noticias para Spieth, sobre todo después de finalizar empatado en el 12º puesto el pasado fin de semana, en el WGC FedEx St. Jude Invitational de Memphis. El texano jugó rondas de 70 o menos golpes en los cuatro días del torneo. Algo que no hacía desde hace más de 11 meses en torneos del PGA Tour. ¿Será el principio de su recuperación?
