Jon Rahm no podía evitar la cara de contrariedad tras acabar tercero el Northern Trust después de liderarlo o coliderarlo durante 69 hoyos. El de Barrika es de los que pasa página rápido y, muy probablemente, lo hará antes de que amanezca este martes, pero el mal sabor de boca le va a durar un buen rato. Es un ganador y no lleva bien situaciones como las que han ocurrido este domingo. Un mal día en los greenes y el fatídico hoyo 15 se han cruzado en su camino para quitarle el triunfo en el primer playoff de la FedEx. Aquí tienen sus declaraciones completas…
La primera reacción nada más terminar (Kepa, al rescate)… «Aún no he podido digerirlo. Mi hijo me ha puesto una sonrisa en la cara, así que al menos no estoy con un humor de perros».
Los putts y el hoyo 15… «Supongo que es fácil centrar toda la atención en el hoyo 15, aunque la realidad es que no he metido un putt en todo el día. Creo que de tee a green no he podido jugar mucho mejor y mi sensación es que debería haber tenido un liderato más amplio por cómo estaba jugando. Los putts del 9 y el 10 fueron muy buenos, pero me ha costado hacerme a la velocidad de los greenes. Hoy estaban muy diferentes. Y respecto al hoyo 15, qué decir, he pegado los cinco golpes de ese hoyo exactamente como quería pegarlos. Esa es la parte mala. Pensé que el viento la iba a empujar más y evitaría el búnker. Esa fue la diferencia».
Lo que más duele después de una jornada de golf así… «Sólo he jugado cuatro hoyos por encima del par en toda la semana. Lo normal es que si yo hago eso consiga un resultado más bajo del que he tenido. He jugado un gran golf, aunque todavía no he pensado en lo bueno que me llevo de aquí. Es pronto. Duele mucho pensar en lo que ha pasado. Es la segunda vez que estoy para ganar en este torneo y otra vez el mismo búnker me golpea de nuevo. Golpe muy parecido desde el tee al de 2019 aunque con diferente viento. Esto es lo que más me molesta, quedarme corto cuando tengo una opción de ganar».
El gran objetivo, no obstante, no cambia… «En los hoyos 17 y 18 no hice mis mejores swings, pero bueno, hay que dejarlo atrás, pensar ya en el próximo torneo y sobre todo en Atlanta, que es el gran objetivo».
