Esta semana se disputa el AT&T Pebble Beach Pro-Am, primer evento designado de la temporada en el PGA Tour, con una bolsa de premios de 20 millones de dólares, en el que profesionales y amateur comparten juego. Entre los aficionados destacan nombres de personajes populares como Tom Brady, Aaron Rodgers, Larry Fitzgerald o Condoleezza Rice. Aunque el protagonista de nuestra historia no es otro que Pau Gasol.
Mientras su hermano Marc, a miles de kilómetros, se prepara para anunciar esta tarde la que probablemente sea su retirada definitiva de las canchas, el mayor de los Gasol, leyenda de Los Ángeles Lakers y del baloncesto español, tratará de demostrar sus habilidades en el golf jugando jueves y viernes con el argentino Emiliano Grillo. Y para ello lleva días preparándose, incluyendo una ronda de prácticas ayer en la que pudo compartir partido con el estadounidense Collin Morikawa.
Se da la casualidad de que Morikawa es no solo un gran aficionado al baloncesto sino, desde siempre, un apasionado de los Lakers. Así que tener la oportunidad de compartir ronda de prácticas con él en Pebble Beach ha sido toda una experiencia que no solamente inmortalizó con una divertida fotografía en la que se aprecia la tremenda diferencia de estatura entre ambos sino explicando ante los medios de comunicación cómo ha sido vivir este momento para él.
«Es increíble, lo conocí hace un par de años y lo pasamos muy bien. Anoche cenamos juntos y le pregunté si iba a salir a jugar hoy. Es muy divertido ver lo mucho que le gusta el golf a deportistas de otras disciplinas. Les pica al gusanillo y están deseando ir a jugar. Fue muy divertido jugar juntos hoy, con alguien a quien he idolatrado mientras crecía», señaló el bueno de Collin, que trata de recuperar su mejor versión.
