Quedan seis días para el esperado regreso del PGA Tour y es hora de ponerse al día para que no le pillen sus amigos con el paso cambiado. Entre el viernes del THE PLAYERS, cuando se suspendió el golf en el circuito americano, y el próximo jueves 11 de junio, cuando se ponga en marcha la maquinaria otra vez en el Colonial Country Club, habrán pasado 91 días. Tiempo largo y suficiente para haber quedado desactualizado con los datos. No se inquieten, para evitarlo, aquí les vamos a recordar las estadísticas más importantes que debe tener en cuenta a día de hoy:
– Rory McIlroy había enlazado siete torneos consecutivos quedando entre los cinco primeros antes del THE PLAYERS. Además, había conseguido mantenerse entre los 10 primeros de los torneos después de 25 se las 28 vueltas anteriores. Su media de golpes desde el The Open era de 68,27 y su porcentaje de greenes en regulación era el mejor en los últimos cinco años: 71%. Por supuesto, eso seguro que no lo han olvidado, era de largo el mejor golfista del PGA Tour de tee a green.
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– Es probable que el nombre de Denny McCarthy no les suene demasiado a bote pronto… Es lógico, no se asusten, tampoco va a ser todo culpa del Coronavirus. El bueno de McCarthy aún no ha ganado en el PGA Tour y en sus últimos 40 torneos no ha quedado ni una sola vez entre los cinco primeros. Es decir, es claramente un jugador que viaja por debajo del radar. Sin embargo, hay un aspecto del juego en el que no hay nadie mejor que él. De largo. Es un pateador increíble. En los dos últimos años en el circuito ha sacado una media de más de un golpe en los greenes por vuelta y, ojo al dato, tiene un porcentaje de conversión en putts de tres metros o menos del 91,4 por ciento. Una salvajada. Además, como guinda a este pastel, sólo ha fallado un putt de los últimos 1.050 que ha tirado desde menos de un metros. Impresionante.
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– De tee a green ya hemos dicho que el mejor es McIlroy, pero a su estela hay dos jugadores que pueden también hacerlo muy bien en Colonial, caso de Justin Thomas y Viktor Hovland.
– ¿Quién tiene el mejor juego corto del PGA Tour ahora mismo? Bueno, esa respuesta seguro que es opinable. Nosotros vamos sólo a los datos puros y duros. El que más ventaja saca al resto en este segmento del golf es Brandt Snedeker (0,50 golpes por vuelta). Su putt determinante seguro que ayuda mucho a este magnífico rendimiento en las recuperaciones.
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– Volvemos a Hovland para recordar que tiene un dudoso honor. No hay ningún jugador con una diferencia más grandes entre su juego largo y el corto. Mientras el noruego gana 1,69 golpes de media desde el tee por ronda, pierde 0,59 alrededor de green. La moraleja es obvia: el día que mejore su juego corto habrá que ver quién para al nórdico. Otro que tiene una gran diferencia, pero al inversa es Jordan Spieth. Gana con su juego corto 1,09 golpes y pierde de tee a green nada menos que 0,69.
