Inicio Grandes Circuitos PGA Tour Contra la crispación, detalles de complicidad y hasta mutua admiración
Ras de hierba de la segunda jornada del Fedex St. Jude Championship

Contra la crispación, detalles de complicidad y hasta mutua admiración

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Scottie Scheffler y Jon Rahm. © Golffile | Eoin Clarke
Scottie Scheffler y Jon Rahm. © Golffile | Eoin Clarke

Digamos que Jon Rahm se ha convertido en un auténtico talismán para Scottie Scheffler. Digámoslo así, por no mirarlo desde el lado negativo, que sería considerar al texano gafe para el español…

El caso es que ayer jugaban juntos por octava vez en lo que llevamos de temporada y una vez más Scheffler se llevaba el gato al agua, con una ronda de 66 golpes (tuvo que embocar un putt de birdie en el 18 de casi cinco metros para rubricarla), por los 67 del vasco. Así había ocurrido ya en seis de las siete anteriores ocasiones, pues sólo en una oportunidad Jon consiguió al menos empatar el ‘duelo’. ¿Talismán o gafe? En fin, la cuestión también es que Scheffler es muy bueno, no le demos muchas vueltas.

El asunto tiene todavía más enjundia si consideramos que ambos han luchado durante buena parte del año por el trono mundial, semana a semana, además de haber finalizado la temporada regular como números 1 y 2 de la Fedex Cup y ser por tanto los más serios aspirantes a la gran victoria final en el ranking.

Y sin embargo, esta enconada rivalidad no tiene desde luego reflejo en sus maneras en el campo. No hay sombra de aspereza o tensión. El respeto y hasta la admiración mutua están por encima de cualquier otra cosa. Después de la jornada del jueves, en la que las cosas no le fueron nada bien al español, Scheffler declaraba: “Esa manera que tiene Jon de luchar ahí fuera… Obviamente hoy no le han ido bien las cosas, pero todavía se veía el talento. Él es tan bueno…”

Eso, el jueves. Ayer, viernes, Jon cerraba la ronda en el 18 embocándola desde la arena para salvar un par de otra dimensión después de haber mandado al agua la bola desde el tee, y el gesto de ambos jugadores al terminar, a la hora de estrecharse la mano, era de lo más elocuente. El texano miraba al de Barrika, como preguntándole ¿y tú, de qué galaxia has venido?, mientras ambos se reían y hasta se abrazaban. Antes, otra escena ya se había hecho viral: Scheffler pegaba desde el tee y al darse rápido la vuelta se chocaba con Jon, para terminar abrazados en una maniobra casi cómica. De momento le está tocando al español la parte más frustrante, la de irse al hotel sin haber sido el mejor, pero seguro que lo da todo por bueno si en la Ryder cambian las tornas… O quizá pueda sacarse la espina un poco antes, porque seguro que en los dos próximos torneos vuelven a coincidir en el partido estelar del día. En época de tanta crispación, en todos los sentidos y direcciones, es saludable y valioso comprobar cómo llevan estos dos titanes la rivalidad.

– Muchísimo calor en Memphis. Y una humedad que superaba ayer de largo el 80 por ciento, que es verdaderamente lo que más aplana al personal. Denny McCarthy llevaba los pantalones absolutamente empapados, de arriba abajo. “Como si se hubiera tirado a una piscina con ellos, jamás había visto nada igual”, señalaba divertido Tommy Fleetwood, compañero de partido del estadounidense. Había que hidratarse constantemente para no perderse por el camino y, como apuntaba con tino Spieth, no olvidarse tampoco de comer, algo muy habitual en este tipo de jornadas, pues el cuerpo aparentemente no pide nada sólido, antes bien, hasta lo rechaza. La cuestión de poder jugar con bermudas en días así está más que superada. Vamos, que tampoco pone nadie el grito en el cielo. El propio Spieth señalaba al respecto: “poco o nada habría cambiado, sólo el hecho de sentir las gotas de sudor resbalando por las piernas, en lugar de ver mis pantalones más obscuros”.

Jordan Spieth durante la segunda jornada en el TPC Southwind. © PGA Tour
Jordan Spieth durante la segunda jornada en el TPC Southwind. © PGA Tour

Poco o nada van a cambiar las condiciones meteorológicas, con una sensación térmica que puede alcanzar y superar por la tarde los 40 grados, debido al calor y la humedad, aunque durante el fin de semana, sobre todo hoy, sábado, existen posibilidades de alguna tormenta eléctrica. Es justo esa sensación que ayer describían así algunos jugadores: “el calor parece salir del suelo y empieza a comerte por los pies”.

– Jon sale hoy a jugar a las 8,06 de la mañana, horario local (15,06, según el horario peninsular español), junto a Matt NeSmith y Harris English y cerca de cuatro horas antes que el partido estelar, en el que marcharán el líder, Lucas Glover, junto a Jordan Spieth y Sungjae Im.

Resultados en directo del Fedex St. Jude Championship