Tiger Woods (-18) va disparado a la caza y captura de su victoria número 82 en el PGA Tour. O lo que es lo mismo, al récord absoluto de triunfos en el Circuito Americano que está en poder de Sam Snead. Un récord más. Otro objetivo tachado de la lista. Una proeza más de un deportista legendario. Tiger marcha desbocado y sin frenos en Japón.
La maratón de golf celebrada este domingo en el recorrido Accordia Golf Narashino Country Club ha servido para confirmar que de momento no hay quien haga sombra a Tiger Woods en el ZoZo Championship. Ha jugado hoy un total de 29 hoyos (algo más de ronda y media para recuperar el tiempo perdido por las lluvias torrenciales del viernes) y su parcial ha sido de seis bajo par. Faltan siete hoyos para acabar el torneo, que se disputarán el lunes, y su ventaja es de tres golpes con Hideki Matsuyama, seis sobre Gary Woodland y siete sobre Rory McIlroy. Imperial. No hay quien le tosa.
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En la tercera ronda entregó una tarjeta de 66 golpes, con seis birdies y dos bogeys. Siempre bajo control. Siempre dominando la situación. Recordando al Tiger Woods de su época más dominante. Sin dar opciones al resto. Su juego de tee a green ha sido muy bueno. Ha cogido nueve calles y 15 greenes y su putt se sigue moviendo con una soltura extraordinaria. No hace concesiones en un recorrido que no se caracteriza, precisamente, por ir regalando caramelos.
En la cuarta ronda, que se jugó sin descanso después de la tercera, no bajó el pistón. Tres birdies y un solitario bogey en once hoyos y cada vez más ventaja. Había una pregunta en el aire antes de la larga jornada de golf que se iba a jugar hoy: ¿Cómo aguantaría Tiger Woods después de más dos meses sin competir y una última operación de rodilla? Duda despejada. Como un chaval… Tanto es así que los árbitros hacían sonar las bocinas cuando el californiano estaba al borde de green en el hoyo 11, con un delicado approach por delante para hacer la recuperación y salvar el par… Lo podría haber dejado para mañana, pero no. Ha preferido acabar. Su toque ha sido magistral. La ha dejado dada y ha hecho el par antes de irse a dormir. Plis, plas.
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Precisamente, este último golpe antes de bajar las persianas en el ZoZo Championship ha sido una nueva muestra del espectacular nivel de juego corto que está mostrando esta semana. Sin duda, está siendo lo mejor de su repertorio, donde la solidez está siendo también fabulosa. Es la mejor versión de Tiger desde el Masters de Augusta.
Quedan siete hoyos y salvo debacle inesperada mañana, da la sensación de que será un paseo militar para Tiger. Esta vez sí con un público japonés abarrotando el campo y totalmente entregado. Cuatro golpes son muchos para recuperar a un golfista que tantas y tantas veces ha estado en esa situación y, sobre todo, cuando se le ve jugando tan seguro y confiado.
En cuanto a los españoles, Rafa Cabrera Bello (-4) ha podido completar los 36 hoyos que le restaban y ha terminado el torneo con sendas vueltas de 70 y 67 golpes. Ha recuperado más de diez posiciones en la última ronda y, ahora mismo, ocupa el puesto 29º. Habrá que ver cómo acaba este lunes cuando todos los jugadores puedan completar el torneo. Una buena semana, sumando, aunque lejos de la cabeza.
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Por su parte, Sergio García (-3) también ha podido acabar el torneo sobre la bocina… y nunca mejor dicho. Han anunciado la suspensión justo cuando empezaba a jugar su último hoyo. Al menos ha podido terminar y no tendrá que regresar este lunes para jugar. En la tercera ronda entregó su mejor tarjeta de la semana, un resultado de 67 golpes, con seis birdies y tres bogeys. Su secuencia del 1 al 8, con cinco birdies sin fallo, ha sido su momento más dulce del torneo. En la última ronda ha hecho 69 golpes.
