Eindhoven. 7 de junio de 2009. Llueve. Llueve mucho. Cualquiera diría que estamos en San Sebastián. Unas gotas no van a asustar precisamente a una donostiarra como Tania Elósegui. Es domingo y pelea por la primera victoria de su carrera en el Ladies European Tour. El agua va a jugar un papel importante, pero no precisamente la que cae del cielo…
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«El hoyo 17 del Eindhovensche Golf Club era un par 5 largo. Si pegabas un buen drive se podía llegar de dos. Mi golpe desde el tee fue bastante bueno, a calle y recuerdo que hice bastantes metros. Estaba un golpe por detrás, así que no había ninguna duda: tocaba tirar a green. La bola fue directa a un ‘hazard’, a unos 30 metros del hoyo. En ese momento dices, listo, se acabó. Un golpe por detrás y con la bola al agua… Sin embargo, después de mucho buscar encontramos la pelota. Estaba semihundida. Media bola metida en el agua y la otra media fuera. Había que arriesgar. Intenté el golpe como pude y acabó en green. La dejé a unos 10 metros del hoyo…», asegura Tania a Ten Golf once años después.
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Era putt para birdie y lo metió. Dentro. Un putt increíble. En apenas diez minutos pasó de tener el torneo perdido a empatar en cabeza con Diana Luna, la golfista italiana. «Recuerdo que pensé, uf, si has metido ese tranco es que este torneo puede estar para ti…», recuerda Elósegui.
Y así fue… No sin algún incidente más hasta levantar el trofeo. Tampoco olvidará nunca Tania lo que ocurrió en el segundo golpe del hoyo 18. «Justo cuando estaba en mitad del ‘backswing’ sonó la sirena de una ambulancia. Por suerte, me paré a tiempo y me pude quitar de la bola, empezar de nuevo la rutina y pegué un golpe muy bueno a tres metros y medio de la bandera. Me acuerdo perfectamente de los murmullos del público con la sirena, las risas y hasta algún aplauso…En qué momento sonó la sirena, madre mía…», señala con una sonrisa Tania.
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Diana Luna se fue al búnker y pateó para par antes que la española. Lo metió y lo celebró por todo lo alto. De algún modo pensaba que aseguraba el desempate. Sin embargo, Tania aún debía patear para birdie. «Lo metí y saqué un puño muuuuuuy largo. Diana había celebrado mucho su putt de par, pero yo la superé», asegura.
La ceremonia de entrega del trofeo fue rápida porque seguía lloviendo y todo el mundo andaba con paraguas. Fue un torneo a tres rondas, por lo que muchas amigas de Tania ya se había ido, así la celebración se aplazó para la siguiente semana, en Portugal, donde jugaban el siguiente torneo. «Hubo una gran mariscada», recuerda.
Con aquella victoria en Holanda, Elósegui aseguró su presencia en la Solheim Cup. Nada menos.
Así contamos la victoria de Tania Elósegui en el ABN AMRO Ladies Open: