Webb Simpson (-6) y Matthew Fitzpatrick (-6) lideran el Workday at The Concession, primer campeonato del mundo del año, después de la primera jornada. A los dos se les puede considerar líderes sólidos, peligrosos, pero el arranque de Sergio García (-5) y Jon Rahm (-4) es también algo así como un canto a la esperanza. Difícilmente se puede romper una maldición como la que persigue al golf español en 22 años de historia de los World Golf Championship si el primer día ya se queda uno muy lejos de la cabeza. No es el caso, afortunadamente, porque precisamente ha ocurrido todo lo contrario.
Dustin Johnson, tocado y (casi) hundido en el WGC Workday
Aunque queda un mundo, no es ninguna mala noticia en un día en el que algunos ilustres candidatos ya han dilapidado prácticamente todas sus opciones, o bien se han quedado sin margen de error: DeChambeau (+5), Johnson (+5), Fleetwood (+3), Westwood (+2) o Thomas (+1). En la cara de la moneda, junto a los dos españoles y a los líderes, conviene destacar a Brooks Koepka (-5) y Patrick Reed (-4).
Golpazo y birdie de Sergio García para empezar en The Concession
Nadie ha sumado más birdies que Sergio en esta primera ronda, hasta ocho ha convertido el de Borriol. El asunto tiene aún más miga si consideramos que el putt más largo que ha enchufado ha sido el último, en el hoyo 9, desde unos dos metros y medio. Sea como sea, tampoco es el momento de seguir dando la matraca con el putter de García, pues al fin y al cabo hoy ha leído bien los complicados greenes del The Concession. Además, por supuesto, ha sido de lo mejorcito de tee a green, si no decididamente el mejor, y tan solo algunos errores puntuales han evitado que terminara incluso líder en solitario. Esto aún puede dar muchas vueltas, pero a Sergio se le ve cómodo en este campo, le gusta. Su driver ha echado humo (sólo fallaba dos calles) y con los hierros y los wedges ha impartido lecciones. Magnífica su puesta en escena.
Declaraciones de Sergio García: «Es un campo con mucho truco alrededor de los greenes»
Nadie ha jugado más WGC que Sergio (éste es su número 63) y suma ya hasta veinte top ten en estos torneos, así que no parece esta semana un mal momento para subirse al carro de los ganadores. Sería un bonito y merecido premio a la persistencia. Y a la excelencia.
Rahm, a fondo: el futuro de Tiger, su nueva bola, la historia de la Ryder del 69…
Jon, por su parte, ha ido de menos a más. Sólo un error en la salida del 18, la última parada de la vuelta, le cerraba la posibilidad, incluso, de haberse unido al grupo de los líderes. Terminaba con bogey, pero también con una serie de cuatro birdies en los seis hoyos anteriores, que hasta pudo haber sido mejor. El de Barrika mantiene esa fortaleza granítica de tee a green (ahora mismo es el tercero mejor del torneo en la estadística de golpes ganados de tee a green, sólo por detrás de Fitzpatrick y, cómo no, de Sergio, que ha sido el mejor en este apartado).
Jon Rahm, del susto a la risa nada más finalizar su ronda en The Concession
Por momentos, da incluso la sensación de que Jon no necesita demasiado para producir resultados notables, característica que desde luego sólo adorna a los más grandes. De todos modos, hoy también hay que señalar que su putt más largo de birdie ha sido de siete pies (poco más de dos metros), muy en la línea de Sergio y, en general, de lo que le viene ocurriendo con asiduidad en los últimos tiempos. Con la alegría y el alivio que dan esos bonus de media y larga distancia. Que se lo digan a Koepka, que hoy cerraba su ronda con sendos putts de birdie convertidos desde tres y diez metros. O a Fitzpatrick y a Simpson, que también se han lucido con algunos puros considerables.
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Rafa Cabrera Bello (+2), el tercer español en liza, va a tener que remar mucho para incorporarse a la fiesta. Demasiados bogeys en su tarjeta (5). El canario ha sido otra de las víctimas del The Concession, un campo que perdona muy poco y en el que las recuperaciones son complicadas (y Rafa sólo ha cogido la mitad de los greenes en regulación).
