La metáfora ha sido perfecta. Como si estuviera escrita. Xander Schauffele (-11) tiraba su último putt de birdie en el hoyo 18 de la segunda vuelta olímpica y al mismo tiempo que la bola se dirigía mansa y obediente a la cazuela un poderoso trueno atravesaba el cielo del Kasumigaseki. Schauffele ha protagonizado hoy una tormenta perfecta para colocarse líder del torneo. Ha firmado una tarjeta de 63 golpes, igualando la vuelta de ayer de Sepp Straka, que a su vez había empatado el resultado más bajo en unos Juegos Olímpicos.
Schauffele ha liderado la rebelión de los grandes gallos. Ya decíamos ayer que los favoritos habían quedado agazapados después de la primera jornada y que iban a necesitar una reacción si no querían verse demasiado atrás el fin de semama. Pues la reacción ha venido y, prácticamente, ha sido en cadena. Schauffele (-11) ha hecho 63 golpes, Rory McIlroy (-7) ha hecho 65, Shane Lowry (-7) ha hecho 66 y Hideki Matsuyama (-8) llevaba un parcial de seis bajo par en 16 hoyos, con opción de birdie en el 17, cuando el juego se ha detenido por segunda vez por tormenta eléctrica… Ay, las tormentas veraniegas asiáticas.
El asunto es que el torneo de los Juegos se ha puesto muy bonito, con un buen puñado de los favoritos tomando posiciones para el asalto a las medallas. Schauffele, sin ir más lejos, es el tercer mejor jugador del torneo por ranking mundial, aunque todavía le falta en su palmarés la victoria en un Grande. Una medalla de oro sería mucho más que una compensación para una familia que vive los Juegos de una manera muy especial. El norteamericano forjó su liderato en un final de vuelta estratosférico, con cuatro birdies en los cinco últimos hoyos, buena parte de ellos después de haber pegado tirazos a la bandera.
Royr McIlroy se ha metido en la pelea aunque sigue ofreciendo muchas dudas. No termina de cuajar una gran vuelta de principio a fin. Antes o después termina cometiendo un error que lo frena o lo aleja, y así es muy difícil aspirar al oro. Eso sí, ya está metido de lleno en la pelea por las medallas, igual que ocurre con otro de los grandes favoritos, Hideki Matsuyama (-8). El japonés, campeón del Masters de Augusta en abril está jugando bajo una presión extraordinaria, pero hoy ha sabido encontrar la manera de hacer birdies, pese a que cada tiro que no va al sitio se le clava como una puñalada. Parece difícil que pueda lograr el oro con ese nivel de ansiedad y exigencia, tendrá que controlarlo porque de lo contrario parece una quimera que pueda ganar. Otros nombres poderosos que están colocados arriba son Alex Noren (-8), Shane Lowry (-7) y Paul Casey (-7), con un hoyo todavía por jugar.
No obstante, ante este ataque de algunos favoritos, quienes más y mejor han decidido plantar cara son los jugadores latinos. Gran actuación coral de todos ellos, con especial mención al mexicano Carlos Ortiz (-10), que hoy hizo 67 golpes mostrándose otra vez letal en los greenes para colocarse segundo en solitario. También hay que destacar al chileno Mito Pereira (-8), que hoy entregó saliendo en el primer partido del día una tarjeta de 65 golpes. Su golf de tee a green es extraordinario y explica esta fabulosa racha que acumula de siete top 10 en sus últimos diez torneos, incluidos dos en el PGA Tour. Es la revolución del Mito.
Del mismo modo, están bien colocados para el asalto a las medallas el venezolano Jhonattan Vegas (-6) y el colombiano Sebastián Muñoz (-6) en la undécima posición. Precisamente aquí podríamos cerrar el listón de los grandes candidatos a las medallas, aquellos que están a cinco golpes o menos de la cabeza, aunque tampoco habría que descartar por ahora a los -5 ó -4. Eso sí, ya necesitan algo especial. Es el caso, por ejemplo de Adri Arnaus (-5). Hoy hizo 70 golpes en la ronda muy trabajada. Ha perdido terreno y se le ponen las medallas cuesta arriba, a tres golpes, pero ni mucho menos se le puede dar por descartado.
Quienes sí están ya contra las cuerdas y casi eliminados de la pelea son Collin Morikawa (-3), Patrick Reed (-3) o Justin Thomas (-1), ocho y diez golpes con Schauffele parece una distancia excesiva, incluso para golfistas de su capacidad. Jorge Campillo (+3) también ha quedado descartado.
El juego se suspendió por segunda vez a las 17.20, hora local, 10.20 en España. La jornada se reanudará este sábado a las 7.45 hora local con 16 jugadores aún en el campo. La tercera ronda empezará a las 9.30 local, dos y media de la mañana en España, saliendo de tres en tres.
