El Masters de Augusta nos deja a un José María Olazábal con mayúsculas. Ha demostrado una gran adaptación a un campo en condiciones muy exigentes. Nunca se cansa de dejarnos a todos con la boca abierta. Lo que ha hecho esta semana nos refleja dónde se encuentra ahora mismo, especialmente con el juego corto. Espectacular.
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Con los hierros ha mostrado una mejoría clara con la precisión y con el driver ha dado un paso adelante más que evidente, ha cogido más calles, está más en juego, aunque todavía hay margen de mejora en esta parcela.
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Tanto con los hierros largos como con el driver tiene que seguir progresando para conseguir llevar a la competición lo que ya es capaz de hacer entrenando, o por ejemplo en los swings de práctica. En estos vídeos lo podéis ver…
Me quedo con la impresionante actitud que ha mostrado en la competición después de no jugar ningún torneo desde noviembre del año pasado. Es un comienzo de temporada muy positivo y ahora toca el Champions Tour. Juega esta semana y tenemos muchas ganas de ver cómo se adapta a un campo que en teoría no va a estar tan duro. Hay que seguir progresando.
Ese puño, esa celebración, esa sonrisa en la cara de Olazábal…
En cuanto a Jon Rahm ha vuelto a poner de manifiesto que su juego está al máximo nivel y no tengo ninguna duda de que nos seguirá dando grandes alegrías.
