A las siete y media de la mañana estamos ya en la puerta de entrada del Augusta National. No hay duda. Otro día de multitudes. Imposible de calcular, pero a ojo de buen cubero hay más de mil personas agolpadas a la entrada. Es miércoles y ya se va notando que el gusanillo del estómago sabe que el Masters está a punto de empezar.
La primera parada del día es en la impresionante zona de juego corto del Augusta National. Allí, como siempre, ha empezado, su calentamiento Jon. Comparte algunas impresiones con Patrick Reed. Si tienes que cruzarte con alguien en una zona de juego corto, Reed nunca es una mala opción.
Después de dar algunas bolas para entrar en calor nos vamos al tee del 1 para ver la ronda de prácticas del jugador de Callaway. Pasamos por delante de la tienda. De risa. De horror. Las colas de la tienda no dejan de impresionar. Es alucinante. Nos vence. Lo damos por imposible. Otro día será. Hoy no toca.
El partido de Jon en la última ronda de prácticas es una gozada. Comparte salida con Padraig Harrington, Shane Lowry y Tyrrell Hatton. Ryder Cup en estado puro. Tuvimos la suerte de ver muchos golpes magníficos. Muchísimo nivel.
Nos detenemos a explicar uno muy concreto… En el hoyo 3, par cuatro corto, el drive de Jon se topó con una rama por la derecha de la calle y cayó a plomo en la pinaza. En principio, no había ventana, al menos para los mortales. Una vez más con un golpe de magia pudo solventar la situación y llevó la bola a green. Espectacular.
Una vez más el tiempo es protagonista en las horas previas al Masters. El partido se tuvo que suspender por el aviso de tormenta. Decepción importante de jugadores y público. Ha sido una preparación a salto de mata.
Parece que no va a haber más juego en el día, pero hay suerte, se abre una ventana en el cielo y nos anuncian que se van a jugar los pares 3. No tardamos ni un minuto en comprobar que, efectivamente, es uno de los acontecimientos más especiales de la semana. El ambiente es increíble y pudimos disfrutar del Jon más familiar junto a su hijo Kepa y su mujer Kelley. Qué bien nos lo pasamos.
Y ahora vamos con lo gordo… Parece que la lluvia ha pasado y vamos a poder disfrutar de un gran Masters. ¡Vamos! Aquí os lo iremos contando con los ojos de de dos novatos en Augusta.
*Mikel Galdos e Iñaki Mateo son amigos de Jon Rahm y se encuentran esta semana en el Masters de Augusta