– Este jueves, como quedó dicho, han llegado a Pula Golf el grueso de profesionales y aficionados que a partir del viernes van a disputar el Olazábal & Nadal Invitational. Debe ser curioso eso de ponerte a dar bolas en la calle de prácticas y que, sin previo aviso ni toque de cornetas, se acerquen Olazábal o Miguel Ángel Jiménez, bolsa al hombro, y se pongan junto a ti…
– Álvaro Quirós ha llegado a tierras mallorquinas con un dolor de consideración en la muñeca izquierda… Por la mañana, camino del aeropuerto, tropezaba saliendo de casa y se hacía daño al amortiguar la caída con las manos por delante. Va a ser duda hasta última hora. El de Guadiaro tiene que jugar la semana que viene en Sudáfrica el Alfred Dunhill, a donde acude con una invitación. Esta es su nueva vida y la moneda por el momento sale cruz, pero alegra el cuerpo y despeja algunos nubarrones comprobar cómo lo tiene asumido. Con el sol ya puesto hace muchos minutos todavía lo vemos tirando algunos putts, que es lo único que ha podido hacer por culpa de la desafortunada lesión.
– El duelo a muerte por parejas entre Nadal y Ciganda contra Olazábal y Legarrea no ha podido celebrarse. Lo primero es lo primero y Rafa tenía que trabajar en lo suyo, con la raqueta. El 2017 promete emociones fuertes en el circo del tenis porque el manacorí va a llegar hecho un toro… Al tiempo.
– Impagable la lección magistral de Miguel Ángel Jiménez a algunos de sus compañeros (Cañi, Legarrea, Carlota Ciganda…) en la calle de prácticas. El malagueño les estaba contando con pelos y señales cómo y de qué manera visualiza él en competición un drive desde el tee, dependiendo de si necesita un tiro al fade o al draw… Miguel acompaña la explicación con gestos y movimientos expresivos y, sobre todo, muy particulares. Pero la lección deja poso. Tiene enjundia. Aunque no todos, casi nadie más bien, tienen su elasticidad y genio.
– Jiménez, por cierto, ya había revolucionado antes Pula con su llegada. En menos de quince minutos había organizado una mesa en una de las terrazas de la casa club para dar buena cuenta de un suculento arroz en buena compañía. Con el vascorro, como él dice (Chema, claro), Sergio Gómez, Quirós, Cañi y su pareja, Ingrid… Jordi García Pinto llegaría más tarde pero a tiempo.
– Es más que probable que el Olazábal & Nadal Invitational supere el medio millón de euros en el total de sus cuatro ediciones, cantidad que, como es bien sabido, se destina en cada edición a diferentes acciones solidarias y benéficas. Este año la Fundación Nadal destinará los recursos recaudados a un proyecto educativo para los jóvenes en riesgo de exclusión social, mientras que Sports Mundi, apadrinada por Chema, dedicará su parte a combatir la trata de mujeres y niñas en Nepal. Al final, por supuesto, de esto es de lo que se trata.
– Adrián Otaegui anda también por aquí, muy satisfecho por la temporada que acaba de cerrar. No se conforma. Quiere más. Así que seguirá creciendo al modo Otaegui, paso a paso… El último en llegar es José Manuel Lara junto a su mujer, Alicia. Al valenciano le puede ir mejor o peor, y ahora no atraviesa por su mejor momento profesional, pero uno tiene la sensación de que siempre sabe sacarle el lado bueno a las situaciones. Bravo, Lara. Qué envidia.
