El primer y único torneo de prueba que servirá de test para el campo de golf de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, situado en Riserva da Marapendi, se disputó este martes y contó únicamente con la participación de golfistas de Brasil.
The Olympic Course may be finished, but the surrounding area is still very much under construction. First tee: pic.twitter.com/XXTt4HUbyg
— Pete Madden (@pamadden) marzo 8, 2016
Concretamente, fueron nueve participantes – cinco hombres y cuatro mujeres –, después de que la PGA no pudiera persuadir a ninguno de los mejores golfistas del mundo para tomar parte en este ensayo. Alexandre Rocha, que ocupa el puesto 588º del mundo y que ha tenido la tarjeta del PGA Tour, ha sido el jugador con mejor posición en el ranking en el test. Ha sido, obviamente, un torneo de exhibición, no había dinero en juego, aunque sí se repartieron unas medallas de oro tras el torneo a modo de recuerdo y gratificación hacia los golfistas.
Gold medals all around for the 9 Brazilian golfers who participated in the Olympic gold test event: pic.twitter.com/zekbykkyvm
— Pete Madden (@pamadden) marzo 8, 2016
Alexandre Rocha y Rodrigo Lee compartieron la primera posición en categoría femenina con una tarjeta de 68 golpes, mientras que en la prueba femenina ganó Miriam Nagl con 67 golpes.
The tricky par-3 4th into the sea breeze at the Rio Olympic Course: pic.twitter.com/qu6DxwRNrj
— Pete Madden (@pamadden) marzo 8, 2016
El golf vuelve a los Juegos Olímpicos tras una ausencia de 112 años, pero la entrega del campo en Río se ha visto obstaculizada por las demoras relacionadas con demandas ambientales y disputas sobre la propiedad de los terrenos.
El campo, diseñado por el arquitecto estadounidense Gil Hanse, fue entregado de manera paulatina a los organizadores en noviembre pasado.
El ministro de deportes de Brasil, George Hilton defendió el martes el campo y dijo que ayuda a la biodiversidad de la zona. «Estamos cuidando el ambiente alrededor del campo», dijo Hilton. «Recuperamos toda esta zona, que será buena para el turismo, las empresas y los residentes».
Paulo Pacheco, jefe de la federación brasileña de golf, indicó que el campo será considerado pronto «como uno de los mejores del mundo».
