Todos y cada uno de los golpes que han dado (y van a dar) los jugadores de Europa en el Marco Simone de Roma esta semana están siendo registrados. Todos sin excepción. De ello se encargan Edoardo Molinari y su ejército de sabuesos.
El italiano, asistente de Luke Donald, ha reclutado para la Ryder Cup a un grupo de hombres que se encarga de seguir cada partido, ver cada tiro e introducir en una aplicación todas las coordenadas que exige Molinari: distancia, tipo de golpe, dónde ha terminado, margen de error, lo que le queda a la bandera…
Toda esta valiosa información le llega en tiempo real al mayor de los hermanos Molinari, que se encarga de procesarla, masticarla y entregársela en bandeja a Luke Donald. Con esos datos sobre la mesa se toman las decisiones. Es el laboratorio de Europa y ahí dentro tenemos a dos españoles: Edu y Antón Larrañaga. Son hermanos y, obviamente, no es una casualidad. Molinari fichó a Edu, a quien conocía muy bien de la época que fue caddie de Álvaro Quirós y él propuso a su hermano. Una experiencia dura, pero de un valor incalculable.
Hablamos con Edu Larrañaga que nos explica exactamente cómo funciona el laboratorio de Edoardo Molinari: