Mike Greller no se lo pensó dos veces. Le pidió ayuda a su jefe y se subió al árbol imponente que preside la calle del hoyo 18 de Pebble Beach para buscar una bola que no aparecía por ningún lado. Jordan Spieth le puso las manos a modo de espuela para que se subiera y Greller llegó muy arriba tratando de encontrar la caprichosa bola…
Daniel Berger conquista Pebble Beach a golpe de eagle
No hubo manera. Pasaron los tres minutos y no apareció. Penalidad por bola perdida y vuelta al tee a pegar el tercer golpe. Lo mejor de la historia es que la pelota no era precisamente la de Jordan Spieth, el jefe de Greller, sino la de Tom Hoge. Gran gesto de deportividad y compañerismo, aunque no sirviera para encontrar la bola. Hoge acabó con bogey, en el puesto duodécimo. En el momento de perder la bola apenas un golpe separaban a Hoge de Spieth. Momento deportivo de la semana.
Michael Greller risking life and limb on 18. pic.twitter.com/aNybDPjaph
— Skratch (@Skratch) February 14, 2021