La primera jornada de la Presidents Cup nos deja de momento un resultado contundente a favor del gran favorito, el equipo de Estados Unidos, que se ha impuesto con un resultado de 4-1 en estos cinco primeros partidos de foursomes o golpe alterno.
Visto lo visto, con dos de los cinco duelos llegando al hoyo 18 y otros dos al 17, quizá pueda concluirse que el equipo Internacional no merecía un marcador tan adverso, pero ¿quién se siente verdaderamente capaz de especificar lo que es justo o injusto en este deporte, mucho más en modalidad match play?
A modo de resumen: el primer partido que enfrentaba a Cantlay y Schauffele ante Scott y Matsuyama es el único que no ha tenido demasiada historia. Tres birdies consecutivos de los norteamericanos en los hoyos 5, 6 y 7 les procuraban una renta cómoda que, a partir de ese momento, iban a mantener y ampliar prácticamente a base de pares, para acabar arrollando por un claro 6 y 5. El siguiente duelo se lo llevaban Thomas y Spieth ante Im y Conners (2 y 1) más por oficio y don de la oportunidad que por otra cosa. Tampoco Morikawa y Young han sometido con autoridad a Tom Kim y K. H. Lee, a pesar de ganar 2 y 1; y en el siguiente partido saltaba la gran sorpresa, pues Scheffler y Burns caían ante Si Woo Kim y Cam Davis (2 arriba). En el último duelo, Pereira y Pendrith aún tenían la opción de ajustar el marcador, incluso hasta un 3-2, pues se plantaban en el tee del 18 con el partido empatado ante Finau y Homa, pero los estadounidenses inclinaban la balanza de su lado con un par en este último hoyo, tras fallar el chileno la salida.
Se pueden hacer al menos dos lecturas de lo sucedido hoy en el Quail Hollow Golf Club de Carolina del Norte. La primera no es muy halagüeña para el equipo de Trevor Immelman, puesto que es muy legítimo preguntarse si el equipo internacional no ha dejado escapar una excelente oportunidad de dar un golpe sobre la mesa en una jornada en la que hombres como Spieth, Young, o los mismos Finau y Homa, no han estado especialmente brillantes o, en el caso de Scheffler y Burns, resolutivos en la hora de la verdad. Según esta lectura, los muchachos de Davis Love III habrían obtenido un resultado contundente sin haberse exprimido al máximo, así que mejor no pensar lo que pueda ocurrir cuando sí lo consigan…
Hay otra lectura, es cierto, que también resulta razonable y que nos deja las puertas abiertas a una Presidents más emocionante: el equipo Internacional ha mostrado el coraje y el talento suficiente para alargar los partidos y meter en problemas a los grandes favoritos. Y, además, tampoco cuesta demasiado suponer que varios de sus componentes puedan mejorar sus prestaciones en los greenes, donde se han visto claramente superados en varias fases de la jornada.
1. Cantlay y Schauffele ganan por 6 y 5 a Scott y Matsuyama. Los dos californianos han sido una roca. Y además tampoco han necesitado poner sobre el tapete todos sus recursos ante un japonés y un australiano que se han mostrado demasiado erráticos en todas las parcelas del juego.
2. Thomas y Spieth ganan por 2 y 1 a Im y Conners. Cualquiera diría que los foursomes son la modalidad preferida de un jugador como Spieth, que no es precisamente un prodigio de regularidad de tee a green, aunque el texano es tan bueno que cualquier cosa puede suceder con él, pero el caso es que en la Presidents ha jugado ya seis foursomes y los ha ganado todos. De locos. Otra cosa es en la Ryder, donde ha ganado tres, ha perdido dos y ha empatado otros dos…
A Im y a Conners les ha faltado sólo algo de instinto asesino, dicho mal y pronto, sobre todo después de igualar el partido en el hoyo 12. Pero, claro, Thomas y Spieth no son de los que se echan a temblar ante las dificultades. Un putt de Thomas en el 15, desde más de siete metros, resultó clave para ganar un hoyo que en realidad tenían muy comprometido y poner una diferencia decisiva de dos arriba.
3. Morikawa y Young ganan por 2 y 1 a Tom Kim y K. H. Lee. Un duelo dirimido en los detalles… Y también en la consistencia de Morikawa, auténtico sostén de la pareja estadounidense, aunque fuera Young quien decidiera el partido en el 17 con un excelente putt. Notable debut, en todo caso, de los dos coreanos.
4. Davis y Si Woo kim ganan por 2 arriba a Scheffler y Burns. Por momentos pareció que el duelo iba a resultar un paseo para el Número uno del mundo y su gran amigo, puesto que estaban los dos encendidos en los greenes. Sin embargo, la pareja internacional aguantaba el tirón y, luego, en el último tercio de la ronda, Scheffler y Burns se mostraban sorprendentemente erráticos (dominaban por 2 arriba en el tee del hoyo 15 y desde ese punto perdían todos y cada uno de los hoyos).
5. Finau y Homa ganan 1 arriba a Pereira y Pendrith. Un partido muy igualado de principio a fin, en el que los americanos sólo llegaron a gozar de una ventaja de dos hoyos antes del meridiano de la vuelta. En el 18, con todo por decidir, Pereira fallaba la salida, tal y como hiciera en aquel hoyo 72 del PGA, con el título en juego, aunque maldita la gracia que le hará al chileno tal recordatorio…
