Inicio The Open Championship The Open Championship 2016 Escocia no ha tenido piedad de Scott Fernández
El granadino se queda fuera del british tras sufrir una jornada dantesca en el último partido

Escocia no ha tenido piedad de Scott Fernández

Compartir

A Scott Fernández (+10) le ha tocado bailar este viernes con las chicas más feas de toda Escocia. Cinco horas largas de juego, saliendo en el último partido de la segunda jornada y tragándose todos los accidentes o incidentes meteorológicos que se nos puedan ocurrir. Por momentos, la misión de salvar el corte se hacía imposible, como fatalmente así fue al final.

Lluvia de todos los calibres y desde todas las posiciones (de la gota gruesa a la desesperante cortinilla, azotando desde todos los ángulos), viento cambiante con rachas que superaban los cincuenta kilómetros por hora, ropa mojada que había que irse quitando, tres guantes de seco que en el hoyo 3 ya no servían para nada (llevaba otros cinco de agua), toallas que mojaban más que secaban, manos heladas que se quedaban sin tacto y sentido, sobre todo a la hora de patear, hoyos en los que ya resultaba imposible calcular el palo necesario… Dantesco. Aún se mantuvo dentro de la pelea hasta el hoyo 11, donde enviaba la bola a las vías del tren. Todavía lo intentó y de hecho en ningún momento se iba del partido, pero en según qué situaciones es muy difícil hacer birdies, salvo que la suerte te sonría.

Vayamos al lado positivo de la situación, que siempre puede encontrarse, sobre todo en el caso de un chaval de 23 años que acaba de jugar su primer Grande. Para empezar, su primera vuelta de 72 golpes es una excelente muestra de que tiene mimbres más que suficientes para dar la talla en estas citas. Además, el granadino ya tiene ganas de revancha, y así se lo decía a su caddie (Daniel, un joven lugareño, del mismo Troon) caminando en el último hoyo.

 «Ha merecido la pena. Esto es un escudo más y te curte como jugador. Seguro que esta experiencia me va a servir de mucho en el futuro, aunque ha sido muy duro. Le he dicho a mi caddie que tengo que volver aquí para quitarme la espina», resumía un Scott Fernández sonriente, a pesar de todo. La semana que viene estará de nuevo jugando el Challenge Tour, que es el camino que ahora le toca, pero antes o después volverá a cruzarse con el British Open. Y entonces, ya veremos quién tumba a quién.