El 24 de mayo de 2023 quedará grabado para siempre en la memoria de Carolina López Chacarra. No es para menos. El equipo femenino de Wake Forest nunca había ganado la final de la NCAA… hasta el 24 de mayo de 2023. La universidad de Winston-Salem, con menos de 5.500 estudiantes, sí había alcanzado varios entorchados: béisbol (1955), golf masculino (1974, 1975 y 1986), hockey hierba (2002, 2003 y 2004), fútbol masculino (2007) y tenis masculino (2018). Ahora puede presumir también de la corona del golf femenino gracias a la madrileña y a sus cuatro compañeras, que el pasado miércoles al derrotar a Southern California por 3-1.
«Es un sueño difícil de explicar con palabras», cuenta Carol. «Sinceramente, es un orgullo, no sólo por la victoria, sino por poder representar a una universidad tan prestigiosa junto a todas mis compañeras de equipo y haber podido cumplir el sueño que tanto deseábamos», afirma gozosa.
El pelotazo en Scottsdale merecía un gran festejo, sobre todo de vuelta a Carolina del Norte: «Fue una semana muy larga y estábamos todas muy cansadas. Tras el triunfo nos fuimos todo el equipo a cenar y a disfrutar de un helado. Al llegar a Winston-Salem, nos tenían una sorpresa preparada: decoraron toda la casa club y las instalaciones con globos y pancartas, había mucha más gente de la que nos esperábamos, profesores, entrenadores, otros atletas, donantes de la universidad… Fue una pasada», recuerda.
La española, a quien emocionó especialmente la felicitación de su hermano, el profesional Eugenio López-Chacarra, quien vio las dos últimas jornadas íntegras a través del móvil, sonríe cuando se le comenta que su entrenadora, Kim Lewellen, la definió como su «fiera española». Sólo tiene palabras de agradecimiento para su coach: «Es como una jugadora más del equipo en muchos sentidos. En cuanto a entrenamientos y obligaciones hay que cumplir todos los requisitos, pero el resto del tiempo es como una compañera más». ¿Qué os dijo antes del duelo con Southern California para motivaros? «Simplemente que estábamos jugando la final porque nos los merecíamos, que saliéramos a disfrutar, confiáramos en nosotras, tuviésemos paciencia y dejáramos que nuestro duro trabajo diera sus frutos», asegura.
Vigésima primera en la clasificación individual, la española saca conclusiones positivas, a pesar de algunos problemillas: «Estuve peleándome con el drive los primeros días y eso me costó un par de golpes, pero acabé satisfecha por seguir confiando en mí misma y terminar con una gran vuelta el cuarto día de medal». Ganó en cuartos a Lottie Woad (Florida State), empató en semifinales a Jennie Park (Texas A&M) y cayó en la final frente a Catherine Park (Southern California). ¿Balance? «En Europa jugamos bastantes torneos de match play, eso al final es experiencia y todo suma. Todas las jugadoras que están ahí son grandes golfistas y contra todas hay que desplegar un gran golf si quieres ganar tu punto», apunta.
Nunca se ha enfrentado a Rose Zhang en un cara a cara, pero Carolina la pone por las nubes, no sólo por su calidad golfística: «No he tenido el honor de jugar con Rose nunca, pero es una niña admirable. Es una de las personas más nobles y con los pies en la tierra que conozco. Hemos coincidido en muchos torneos ya, y siempre es un orgullo poder pasar tiempo y hablar con ella», dice Chacarra, que sigue paso a paso la senda para convertirse en profesional cuando acabe su periplo universitario (Zhang, de hecho, debutará esta semana al dar el salto la semana pasada tras su segundo triunfo individual consecutivo en la NCAA). «Esta victoria me demuestra sobre todo que el trabajo duro al final da sus frutos tarde o temprano y que lo más importante es tener paciencia y confiar en uno mismo», sostiene la demon deacon, quien planea visitar este verano a la inglesa Mimi Rhodes, compañera de equipo que vive en el Campo de Gibraltar. «Mimi es como una hermana para mí. Desde el primer día que llegué a Wake Forest estuvo ahí para ayudarme en todo momento. Este año hemos compartido piso y eso nos ha unido todavía más. Seguramente me pase unos días por Sotogrande para ir a verla y disfrutar», adelanta.
Carolina ya está en España, pero nada más llegar ya tiene un compromiso donde le encanta participar: el Interautonómico. Chacarra jugará desde el miércoles hasta el domingo en el campo gerundense de Fontanals este torneo por equipos entre autonomías. Madrid, que busca su cuarto título consecutivo, se planta en Cataluña con un equipazo compuesto por las hermanas Blanca y Cayetana Fernández García-Poggio, Paula Martín, Casilda Allendesalazar y la propia Carol. Andalucía, con Marina Escobar y Constanza Guerrero en liza, aunque sin Julia López Ramírez, también aspira a lo más alto. Lucía López Ortega, subcampeona individual de la NCAA tras terminar por detrás de Zhang, liderará el equipo de Baleares.