Iván Cantero no tiene nada que perder esta semana en la gran Final del Challenge Tour. Llega en el puesto 41º del ranking, por lo que sólo le vale ganar o quedar segundo en solitario para ascender al European Tour. Otros jugadores, y él mismo hace un tiempo, habrían visto esta situación como desesperada. Sin embargo, el asturiano está bien entrenado en paciencia. Mira atrás, recuerda dónde estaba en enero y tiene claro que la temporada es un éxito.
Así las cosas, el vigente campeón de España de profesionales, coronado el pasado domingo en Calatayud, ha llegado a Mallorca con la confianza muy alta y la tranquilidad de saber que la temporada está hecha. «Tengo la tarjeta del Challenge Tour asegurada para el próximo año y una categoría mala en el European Tour. Al principio del año pensaba que iba a jugar apenas cinco torneos del Challenge, por lo que estar en la Final, con la tarjeta asegurada para el próximo año y con la opción incluso de mejorar esto, es ya para estar contento», asegura a Ten Golf.
Cantero no tiene presión alguna y tampoco prisa. Aprendió a no tenerla cuando se dio de bruces en su primera experiencia en el European Tour. Sabe que el golf es una carrera de fondo y, lo más importante, está convencido de que lo tiene todo para llegar a la meta. Cuándo suceda le importa poco.
El tercer ingrediente de este cóctel explosivo es la ausencia de miedo. Iván va a jugar en el T Golf con la seguridad de que no tiene nada que perder. Esto no significa que no tenga ambición, todo lo contrario, su objetivo es ganar esta semana, pero con la red de seguridad que da saber que de no conseguirlo la temporada va a seguir siendo un éxito.
