(Serial para despedir 2019. Nuestros profesionales nos cuentan su peor y mejor momento del año. Del subidón, al tierra trágame. Hay de todo, como en botica).
Pep Anglés no ha tenido el año más fácil y cómodo de su carrera. Logró salvar de forma casi heroica los derechos de juego en el Challenge Tour en el último instante, en el último putt en el Hainan Open de China. Antes de eso, mucho trabajo, muchas horas en el campo de prácticas, cambios profundos y complicados con el objetivo siempre de seguir mejorando. Sabe que antes o después toca romper y confía en que 2020 sea ese año definitivo para regresar aún con más fuerza al European Tour. Hay dos momentos de este que tiene grabados. Uno se sitúa en China y el otro en Francia…
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El subidón:
Obviamente fue en el Hainan Open de China… La semana fue de locos. Entré a última en el torneo. Llegué al campo el miércoles por la tarde y sólo pude andar cinco hoyos antes de irme a la cama. Necesitaba como un top 15 para meterme en el siguiente torneo de Foshan. Estaba más allá del puesto 70º en el ranking del Challenge Tour, es decir, perdía la tarjeta. Contra la espada y la pared.
Del subidón, al tierra trágame: Carmen Alonso
Recuerdo que en el hoyo 18 necesitaba un birdie para cumplir el objetivo. Es decir, un hoyo para darle completamente la vuelta a un año difícil. Era un par 5 con mucho viento en contra. Pegué un buen drive, hierro 4 y aún tenía un hierro 8 a 105 metros de la bandera. Mucho viento en contra. Tiré un golpe bajito, contra el viento y salió muy bien, un metro por la izquierda del hoyo y unos cuatro y medio pasado… Tenía que ir para dentro. No lo olvidaré. Una bolita a la derecha del hoyo, cuesta abajo y con viento a favor. La tiré con muchísimo tiento y entró por todo el centro.
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Tierra trágame:
Fue un día oscuro, ocurso, de los peores de mi carrera. Fue en Plenéuf, en el torneo de Le Vaudreuil. Llevaba tiempo entrenando muchísimo, metiendo muchas horas en el campo de prácticas porque había decidido en agosto meterme en cambios muy grandes para tratar de dar un giro al año. Fue una decisión arriesgada, pero sentía que no podía seguir igual. En el hoyo 5 pego un golpe desde el rough y me hago daño en la espalda. No puedo seguir. Creo que iba al par o +1, no lo recuerdo bien. Sin embargo, en el online oficial me habían puesto como +17… Hice las maletas deprisa y corriendo para volver a casa, tuve que cambiar billetes, alquilar un coche y conducir cinco horas a París con un tráfico infernal para llegar al aeropuerto de Orly. El remate fue que no había vuelo directo a Barcelona, ¡desde París! y me tocó hacerlo con escala. Para olvidar.
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