Adri Arnaus (-4) se ha metido arriba en el Catalunya Championship tras entregar una tarjeta de 68 golpes en la primera jornada. El golfista de Moià juega en casa, tiene un apartamento en Girona y entrena en el PGA Catalunya varias veces al año. Sin ir más lejos, la semana antes del ISPS Handa Championship en Infinitum estuvo por aquí y salió a jugar un par de veces. Lo conoce bien, le gusta y tiene claro cómo hay que jugarlo.
Su relación de amor con el Stadium course viene de lejos. Cuando era niño estuvo recorriendo el campo siguiendo a los profesionales en los dos Open de España que se jugaron aquí. Soñaba con poder hacerlo algún día. «Disfrutaba siguiendo a todos los españoles, pero sobre todo me encantaba el campo. Quería jugar aquí. Es un auténtico campo de competición juegues cuando juegues», explica.
Arnaus tiene un plan para jugar el recorrido de Girona y le funciona. Al menos, le ha funcionado muy bien en esta primera jornada. La clave es ponerla en juego. No verán a Arnaus pegando el drive a diestro y siniestro. Prácticamente, tiene una estrategia diferente para cada hoyo. Hoy ha pegado el driver cuando tocaba, pero también ha sacado mucho hierro y mucha madera 3.
En este campo hay que evitar los peligros, que hay muchos, y los números altos. El siguiente paso del plan es aprovechar los pares 5 y hoy Arnaus ha estado de fábula en esa faceta. Su parcial ha sido de cinco bajo par. Mención especial merece el hoyo 7. Ha pegado un drive sensacional al centro de la calle y su segundo golpe ha sido sublime. Ha ido con todo a pegar un hierro 4 a 226 metros con viento en contra y la ha puesto a metro y medio. Sensacional. El mejor momento del día.
Ha terminado con un bogey en el hoyo 9, una de las zonas del Stadium course que más víctimas se está cobrando. La salida es muy estrecha y el green está en alto. El segundo golpe es muy exigente y la recuperación desde el rough alrededor de green es muy complicada. Arnaus ha tenido un putt de dos metros y medio para par y se le ha escapado.
En cualquier caso, Adri se ha metido de lleno en la pelea desde el minuto 1. Está donde quiere. Se encuentra a dos golpes de Oliver Bekker (-6), un veterano sudafricano de 37 años que lo está haciendo muy bien esta temporada. Lleva diez torneos del DP World Tour y acumula nada menos que un segundo puesto, un tercero y seis top ten. Está en un momento dulce, el mejor de su carrera.
En la segunda posición, empatado con -5, se encuentra Haotong Li (-5), que ya lleva tiempo avisando, James Morrison, al que le fue muy bien en la Escuela cada vez que tuvo que venir a la final aquí al PGA Catalunya y Sebastian Heisele. Otros jugadores en forma que se han metido arriba a las primeras de cambio son Hennie du Plessis (-4), Thorbjorn Olesen (-3) o Nicolai Hojgaard (-3). El resultado del gemelo danés tiene un mérito muy especial porque hoy le ha costado un mundo ir por la calle.
En cuanto al resto de españoles, buen arranque bajo par para Ángel Hidalgo (-1), Jorge Campillo (-1) e Iván Cantero (-1). Mientras, Pablo Larrazábal ha hecho el par, Eduardo de la Riva ha empezado con +1, Santi Tarrio ha hecho +3 y Carlos Pigem ha firmado +4 sin ningún birdie.
Las condiciones de juego han sido muy buenas. En algún momento de la mañana se ha levantado el viento, alguna ráfaga que ha hecho dudar a los jugadores en algunos tiros, pero lo más serio en cuanto a aire viene esta tarde. Todo puede pasar porque ya sabemos cómo se las gasta este deporte, pero a priori parece difícil que alguien pueda llegar al -6 de Bekker.
