No hay semana más dura en el golf de alta competición que la final de la Escuela. Lo dicen todos. En seis días te juegas el pan del año siguiente. No hay red de seguridad. Es gloria o drama. Sin término medio.
Una selectividad salvaje donde sólo sobreviven los mejores. Al menos, los mejores en esos 90 hoyos. El PGA Catalunya, donde este jueves arranca el Catalunya Championship, ha sido sede de la final de la Escuela del Circuito Europeo durante nueve años. De 2008 a 2016. Ha sido, por tanto, el escenario de mil y una historias para no dormir.
Aquí tienen una que seguramente pocos conocen. Patrick Reed, el mismo Patrick Reed al que llaman Capitán América en la Ryder Cup y que ganó el Masters de Augusta en 2018, jugó en el PGA Catalunya la final de la Escuela europea en 2011. Acabó en el puesto 137º, por supuesto a años luz de la tarjeta y se llevó en la mochila de vuelta a Estados Unidos un 10 en el hoyo 3 del Stadium Course. Como esa, a puñados.
La mayoría de los golfistas que compiten esta semana en el Catalunya Championship han jugado alguna final de la Escuela en el PGA Catalunya. Concretamente, 93 de los 156, exactamente el 59,61 por ciento del ‘field’. De los 52 partidos que se van a jugar jueves y viernes en 47 habrá al menos un jugador que ha pasado por ese trance.
Pueden ser cinco horas contando historias para olvidar y, sobre todo, huyendo de fantasmas pasados. Incluso aquellos que jugaron sólo una final y consiguieron la tarjeta, es decir, que lograron el éxito absoluto, no libraron los malos ratos. Los nervios y la tensión de la final de la Escuela es incomparable.
El que más batallitas podría contar de los que compiten esta semana es Julien Guerrier. El francés ha disputado nada menos que ocho de las nueve finales en el PGA Catalunya. Sólo se perdió la de 2012. Es el que más ha sufrido de lejos. Los dos primeros días juega con Will Besseling, que disputó cinco, no está mal, y Chris Wood, que estuvo sólo en la primera y logró la tarjeta. En cuanto a los españoles, el que más experiencia tiene en finales de la Escuela en el PGA Catalunya es Pedro Oriol, que atendió a cinco de ellas.
Hay 14 jugadores esta semana en el Catalunya Championship que estuvieron en aquella primera final de 2008. Son Wade Ormsby, Chris Wood, Bernd Wiesberger, Fabrizio Zanotti, Lorenzo Gagli, David Drysdale, Jonathan Caldwell, Richard McEvoy, James Morrison, Julien Guerrier, Mikko Korhonen, Dale Whitnell, Edoardo Molinari, Scott Hend y Darren Fichardt.
Hay también nombres muy destacados que han pasado por el PGA Catalunya en esos años de la Escuela y que ahora mismo están en otra dimensión. Además del citado Patrick Reed, tenemos a Brooks Koepka, Carlos Ortiz, Dylan Frittelli o Emiliano Grillo, por citar sólo algunos.
En el extremo opuesto a estas historias de sangre, sudor y lágrimas, está Thomas Bjorn. El danés sólo ha jugado una vez en este campo y sólo tiene buenos recuerdos. Fue en 1999 y ganó el torneo que por aquel entonces recibía el nombre de Sarzaen World Cup.
