El campo es protagonista todas las semanas en un torneo de golf. Esta vez en India, si cabe, un poco más. El DLF Golf & Country Club de Nueva Dehli no deja a nadie indiferente. «Llegas al tee del hoyo 16 y te explota la cabeza. Es un diseño salvaje», asegura Robert MacIntyre. El escocés lo visita por primera vez. Los apelativos sobre el recorrido de Gary Player, especialmente en referencia a los tres últimos hoyos, se deslizan a la velocidad del bobsleigh: supervivencia, cristo, inenarrable, estrambótico, extremo. «Puedes ir perdiendo de seis golpes el domingo a falta de 18 hoyos y todavía tienes opciones», resume Pablo Larrazábal.
Preguntamos a los golfistas españoles que este jueves comienzan a jugar el Hero Indian Open. Las respuestas no tienen desperdicio. Es lo nunca visto.
Ángel Hidalgo
«En mi vida he visto algo igual. En una palabra es supervivencia. Los 18 hoyos. No tiene un hoyo en el que te puedas relajar. Los tres últimos son de suicidio. El 16 es un par 3. En el Pro Am hemos jugado desde delante y a una bandera corta y yo he pegado un hierro 5. No me quiero imaginar cómo será desde atrás. Son 30 ó 40 metros más. El 17 se podría decir que es casi absurdo. La calle te recibe cuesta abajo y después tienes un desnivel de ‘cien mil metros’. Tienes que levantar la bola que está cuesta abajo. Yo hoy la he pegado limpia y ni opción de llegar arriba. Después, he pegado un hierro 6, alta, al fade y no me he ido al agua por un metro. El green mide doce metros de ancho. Es un cristo de hoyo. En el 18 yo no puedo tirar de dos. No me llega. Es una semana de sufrimiento. Los greenes están muy duros y muy rápidos».
Jorge Campillo
«Son hoyos curiosos. El 16 es un hoyazo. Tiens 230 yardas, pero baja. Un muy buen hoyo con agua a la derecha derecha y búnker. Si te apoyas en la izquierda te recoge. Es espectacular.
El hoyo 17 es muy bonito, pero un poco como de broma. Es inenarrable. Para salir con el driver tienes que volar un agua que no es fácil. Si sales con el hierro 4 tienes después un hierro 6 a un green en alto casi injugable, rodeado de rocas. Desde donde pegas en la calle apenas se ve la punta del trapo. No sé cómo explicarlo…
El 18 es una salida muy tensa con agua por los dos lados. Antes tenía una legua estrecha de rough que dividía la calle en dos u casi siempre te caía abajo a la derecha. Ahora la lengua de rough es bastante más ancha y se te puede quedar arriba. Yo creo que ahí se han equivocado. El segundo tiro es muy bonito. Se puede tirar a green. A mí me gusta el campo, me entretiene. Los primeros nueve son hoyazos. Y el 17 es bonito, pero demasiado extremo».
Pablo Larrazábal
«Puedes llegar a los tres últimos hoyos a seis golpes del líder y tener opciones. El hoyo 16 es un par 3 de 230 metros en bajada. El viento predominante es de la derecha y tienes todo el obstáculo a la derecha. Necesitas una madera 5 o un hierro 4 perfecto. Para hacer tres tienes que pegar un golpazo.
El 17 es el hoyo mítico de este campo. Yo pego hierro 5 de salida y después hierro 9-8 hacia arriba. Es un green rodeado de hazards y con 20 metros de desnivel para arriba. Es el tiro más tenso del campo. Y en el 18 tienes lago hasta dentro del hoyo. Es una salida muy difícil a una isla rodeada de lago. Si pegas una muy buena salida, puedes pegar hierro 4 o madera a green, una península rodeada de agua, y si no puedes tirar a colocar a una zona que también está rodeada de agua. Para mí es el mejor campo del año. El que gane el torneo no va a ser el que patee mejor si no el que mejor juegue. Esto no se ve muchas veces. Normalmente es un concurso de putts. Esta semana es un campeonato de golf y de resistencia. Quien no haga doble bogeys tendrá opciones de ganar el torneo».
Santi Tarrio
«Son tres hoyos espectaculares desde mi punto vista. El 16 es un par 3 monstruoso con vista espectacular. El 17 uno de los más espectaculares que he jugado en mi vida, tirando a green parece que pegas contra un muro de piedra, sólo ves la punta de la bandera y el 18 es un par 5 espectacular. Puedes ir de dos con un riesgo brutal o puedes jugar de tres si no te metes en muchos líos. Son bonitos. Si me gusta o no lo decidiré cuando termine el torneo. Si hago más birdies que bogeys, me gustan, si hago más bogeys que pares, no me gustan».
Alejandro Cañizares
«No me ha dado tiempo a jugar el campo porque he llegado a última hora desde Sudáfrica. Sólo he podido andarlo. El hoyo 16, si se juega desde atrás, es de madera 5 a un green atravesado. El hoyo 17 tiene un diseño de lo más estrambótico. Pegas un hierro 5 a la derecha de la calle para dejarte un segundo golpe cuesta arriba a un green que no se ve nada… solo piedra. Green estrecho con mucho movimiento y en el que te tienes que imaginar que la bandera está ahí. Se puede salir a la izquierda de la calle, que recibe cuesta abajo y tirar luego un hierro 9 a un green que no ves. También puedes pegar el driver a una calle que no se ve y que te obliga a pegar 285 yardas de vuelo, apuntando a un búnker. Si lo consigues, después tienes un bláster a un green súper pequeño. Es un poco drama.
El hoyo 18 es un par 5 muy exigente. Son dos calles con una lengua de rough en medio. Si pegas una buena salida puedes tener de dos un hierro 3 o una madera 5 con mucha agua, y si no, un golpe de colocación a una calle que no se ve. Son hoyos muy peculiares. Hay que tener paciencia y saber colocarla. Es una semana para jugar bien al golf, aunque hay alguna que otra cosa muy loca».
