A Jon Rahm no le gusta perder ni a las chapas. Es de sobra conocido. Por eso, lo que ha ocurrido hoy en el Acciona Open de España no ha sido precisamente una alegría para él. Quería ganar por cuarta vez, lo ha tenido a tiro y se le ha escapado en el último momento tras perder en el segundo hoyo de desempate contra Ángel Hidalgo. Sí, sin duda, había decepción, mucha, pero no es la sensación principal. Sobre todo, Jon se marcha de Madrid con orgullo.
«Si el martes, estando en una habitación de hospital al otro lado del mundo, me dices que iba a quedar segundo, pues lo habría cogido. Claro que es una pena perder en el desempate, por supuesto que me hubiera gustado hacerlo un poco mejor y haber ganado, pero no puedo decir que sea una semana mala, ni mucho menos. Estoy orgulloso de cómo he acabado y de haber sido capaz de darme una opción de ganar, que al fin y al cabo era el objetivo final», ha explicado al terminar.
La clave de este desenlace para Jon ha estado en los greenes. «A Ángel se le ha visto muy cómodo en los greenes toda la semana. Hoy ha metido putts importantes en los momentos que tocaba y yo he tenido un poco de todo. He pegado golpes muy buenos y ha habido momentos en los que he estado cómodo. Y otros en los que no sé qué ha pasado, golpes muy malos como en el 13 o en el 16. De todos modos, el juego corto y el putt no han estado a la altura para ganar un torneo. Hasta el hoyo 16 había fallado tres putts de menos de dos metros», ha señalado.
Rahm ha elogiado la actitud de Hidalgo. «Ha jugado muy bien. Ha sacado un gran birdie en el hoyo 14 y muy buenos pares en los hoyos 15, 16 y 17. Tenía que haber ganado en el hoyo 18, la verdad. Ha fallado el putt del hoyo 1 y ha hecho algún swing malo del que aprenderá seguro, pero se nota que es un tío que tiene mucha garra. Quizá se ha complicado el día más de lo que debería, pero bueno ha ganado y le he dicho que se lo pase bien y que lo disfrute. Ganar en casa, un Open de España, que lo disfrute, se notaba además que lo siente, se ha visto en su reacción en el 9. Se que que le importa, que aprenda y lo disfrute», ha rematado.
Respecto a su futuro, Jon reitera su compromiso. «Siempre quiero venir. Si no vengo es porque hay alguien que no quiere que yo venga. Ha sido muy divertido. Finales así ayudan a que los niños se animen a jugar al golf. Yo soy un privilegiado por estar en situaciones así. Los dos últimos hoyos han sido increíbles. Pocos podemos sentir algo así y merece la pena trabajar para llegar a ese punto. Es un honor poder venir».
