Darren Fichardt (-6) venía volando bajo en el Stadium course del PGA Catalunya. El sudafricano estaba jugando como un reloj: los drives al sitio (eso es norma de la casa), wedges antológicos y el putter echando fuego desde todas las esquinas (segunda norma en la casa Fichardt). Así llegó a colocarse con un ocho bajo par sideral a falta del 18. Impresionante.
Cierto es que las previsiones han fallado. Vaya eso por delante. No, finalmente no se ha levantado el viento como se esperaba y la tarde ha sido bastante apacible. Ha soplado algo, pero no lo que se esperaba. Situación manejable. Es por ello que se han visto algunas vueltas bajas como la Fichardt, Jeff Winther (-6), Julien Brun (-4) o Lukas Nemecz (-4).
En cualquier caso, ir ocho bajo par después de 17 hoyos en este recorrido de Girona es una barbaridad por poco viento que haga. Ha terminado con un doble bogey doloroso en el 18. Ha tripateado desde dos metros engañado por las múltiples mini caídas que llegan a tener estos greenes. El de ida lo falló por un lado y el de vuelta por el otro.
A bote pronto, puede sorprender el liderato de Fichardt, compartido eso sí con Winther y Bekker. Puede sorprender porque sus últimos resultados, más allá de un buen octavo puesto en el Infinitum Golf la semana pasada, no han sido para tirar cohetes. Tanto es así que este año ha jugado ocho torneos y ha fallado cinco cortes. En el último año sólo ha hecho dos top ten.
Sin embargo, la historia está del lado de Fichardt. El sudafricano tiene 46 años, o lo que es lo mismo, está en la ‘media buena’ del PGA Catalunya. Se puede ver como una casualidad, pero lo más probable es que no lo sea. En 2009 ganó aquí el Open de España Thomas Levet con 40 años y en 2014 ya saben lo que ocurrió. Miguel Ángel Jiménez se llevó el triunfo con 50.
Si miramos el top ten del torneo después de los primeros 18 hoyos, sólo tres jugadores bajan de 30 años: Haotong Li (-5), Adri Arnaus (-4) y Hennie du Plessis (-4). Entre los veinte primeros de la clasificación están el propio Fichardt (46), Drysdale (47), McEvoy (42), Walters (41), Gonnet (39), Bekker (37) o Morrison (37). En los tiempos que corren de insultante juventud en lo más alto del ranking mundial, esta clasificación llama la atención.
Sin duda, todo tiene que ver con el tipo de campo que es el Stadium course. Aquí lo más importante es estar en calle, jugar al sitio y atacar lo justito. Si te pasas de agresivo te puedes meter en líos muy importantes. Es un campo al que hay que ganarle desde la calle y con mucha paciencia en los greenes. Hay que esperarlo. Si vas a por él, te acaba encontrando.
Fichardt, además, ya lo ha hecho bastante bien por estos lares. Ha jugado tres veces la final de la Escuela, sacó la tarjeta en 2011 y en el Open de España de 2014 acabó en séptima posición.
Es sólo la primera jornada del Catalunya Championship, pero ahí está el reto para los jóvenes. ¿Serán capaces de derrotar a un campo que parece haber hecho un pacto con las canas?
