Segundo hoyo de desempate para dilucidar al ganador del ISPS Handa Championship, primer torneo del circuito europeo en suelo japonés. La bola de Lucas Herbert (-15) se va por la derecha y se puede quedar sin tiro a green… Tiene fortuna el australiano: está en el camino y puede aliviarse sin penalidad hacia la calle. La bola de Aaron Cockerill (-15), que busca su primera victoria en el DP World Tour, está limpia y larga en la calle. Antes, en el primer hoyo de desempate, ambos habían rondado el birdie. Volvamos a la acción definitiva. Herbert, después del afortunado alivio, pone mucho de su parte, pegando un espléndido wedge para dejarse una gran opción. El tiro de Cockerill no es malo, pero su oportunidad de birdie es más lejana. El canadiense falla. El australiano, no. Así es el golf. Y así abrochan también los triunfos los jugadores de talla. Herbert lo es, o al menos lleva camino de serlo, tal y como demuestra un palmarés que, a sus 27 años, cada vez es más hermoso (suma ya tres victorias en el circuito europeo y otra más en el PGA Tour; el año pasado, asimismo, se asomaba por primera vez tímidamente en los majors, con sólidas actuaciones en el PGA y el Open).
El australiano, además, ha hecho buenos los pronósticos más prosaicos, aquellos que sitúan al jugador con mejor ranking mundial como principal favorito. El golf suele reírse con asiduidad de esta sencilla regla de tres, pero a Herbert no le pesa el estandarte.
Antes de llegar al play off de desempate habían pasado algunas cosas, claro. Por desgracia, Rafa Cabrera Bello (-6), que salía con opciones de victoria, se descolgaba bien pronto de la zona alta con tres bogeys seguidos en los hoyos 6, 7 y 8. No corrían mejor suerte las dos principales bazas locales, Hoshino y Kanaya, que salían a jugar a dos golpes de la cabeza y terminaban muy lejos. A Cockerill y Herbert les bastaban tarjetas de 68 y 67 golpes respectivamente para salir a jugar un desempate del que se quedaba a las puertas Calum Hill (-14). Y, por su parte, Jorge Campillo (-10) cerraba con una tarjeta de 67 golpes una espléndida remontada a lo largo de los últimos 36 hoyos: salía en el primer partido del sábado y ha finalizado dentro del top ten del torneo, resultado que le permite mejorar su posición en la Race to Dubai, donde ya es noveno (Herbert, por cierto, ya es cuarto, sólo por detrás de Rory, Jon y Perez). Sólo Robert McIntyre (-11) ha sumado menos golpes que el extremeño durante el fin de semana. Buen botín de Campillo, que aspira a ganar por primera vez dos torneos en la misma temporada y sigue dando la sensación de que podrá conseguirlo. Herbert, más explosivo y joven, crece y crece; de Campillo diríamos que, a su aire, nunca ha dejado tampoco de hacerlo.
Una última referencia al campo, ya que el circuito europeo se estrenaba en suelo nipón. El recorrido del PGM Ishioka Golf Club, en Omitama, ha dado la talla, sobre todo en cuanto a preparación (esos greenes fantásticos y paulatinamente más firmes, por ejemplo). Los japoneses saben lo que se hacen en esto del golf y el Japan Tour, que ha coorganizado el torneo, debe revelarse como un excelente aliado.
