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DP World Tour Championship | Ras de hierba

La chanza futbolera de Campillo a Rahm en el green del 18

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Jon Rahm y Jorge Campillo
Jon Rahm y Jorge Campillo, al acabar la tercera ronda de la Final de Dubai. (© Golffile | Eoin Clarke)

Jon Rahm y Jorge Campillo han jugado juntos este sábado en la tercera jornada del DP World Tour Championship. Los dos han acabado con birdie en el hoyo 18. Primero ha embocado el extremeño un buen putt de dos metros y después ha terminado Jon con un compromiso sencillo. Se han quitado la gorra, se han saludado y han salido del green. Justo en ese camino, cuando iban rumbo a firmar la tarjeta, han empezado a reírse a gusto. Ha sido a cuenta de un comentario de Campillo…

Jorge, con un enorme sentido del humor, le dijo a Rahm: «oye, ¿sabes cuando el Real Madrid juega con el Elche en el Bernabéu? Pues esa es la diferencia que hay entre tú y yo». Ahí han aparecido las primeras carcajadas por la ocurrencia, rematada por un matiz brillante del extremeño: «bueno, más que el Elche, el Cádiz, que es un poco mejor». Más risas. Ha sido un gran remate a una muy buena jornada de golf de los dos. Rahm hizo 65 golpes y Campillo firmó 71, pero su reacción en los últimos seis hoyos ha sido sensacional. «Es un fenómeno, qué ‘player’», confesaba el propio Jorge a Ten Golf al acabar.

– Hay una famosa sevillana escrita por Manuel Pareja-Obregón y cantada por Chiquetete cuyo estribillo comenzaba así: «en el mismo sitio y a la misma hora, a la misma hora…». Pues eso es más o menos lo que hará Jon Rahm este domingo en el Earth Course de Jumeirah. En el mismo sitio y prácticamente a la misma hora. Un año más. 

Es la cuarta vez que Jon juega la Final de Dubai. En 2017, su estreno, salió el domingo por el tee del 1 a las 11.55, penúltimo partido con Burmester; en 2018 lo hizo a las 11.10, sexto partido por la cola junto a Stenson y en 2019 salió a las 12.00 del mediodía hora local, en la última salida del día con Mike Lorenzo Vera, exactamente el mismo momento en el que lo hará mañana saliendo como líder del torneo y con el objetivo de lograr su tercera victoria. Su compañero de viaje en esta ocasión es Matthew Fitzpatrick, otro que ha ganado dos veces en Jumeirah. Y en el penúltimo partido estará Rory McIlroy, otro que ha ganado dos veces este torneo. Artillería pesada. Pues eso, en el mismo sitio y a la misma hora…

Aunque no todo es igual para Rahm, este año no se ha quedado en el hotel de siempre y asegura que no irá a cenar al mismo restaurante de otros años esta noche. Como si le hiciera falta…

Fitzpatrick tiene claro que la clave hoy en su vuelta en la Final de Dubai ha estado en la paciencia. Arrancó mal al tiempo que Hatton se disparaba en la clasificación. «Es algo que he mejorado mucho este año. Todo fue a raíz de una bronca que me echó Billy (Foster, su caddie) en el mes de abril». Fitzpatrick no ha concretado mucho más, pero los números no están mal. El último torneo que disputó en abril fue el RBC Heritage y falló el corte. Desde entonces, ha jugado 15 semana, ha ganado una, el US Open, el torneo de la paciencia, ha sido segundo otras dos veces, y ha quedado en siete ocasiones entre los diez primeros. En lo que llevamos de 2022 acumula once top 10, el número más alto de toda su carrera. Por cierto, Fitzpatrick acumula -99 en la Final de Dubai. Parece imposible no pensar que se hará centenario este domingo.

Rory McIlroy y los golpes de tres cuartos de swing. Dice el norirlandés que es una de las partes de su juego que más ha trabajado este año. Por eso estaba tan satisfecho de sus dos tirazos en el 8 y en el 9, donde no ha estado lejos de hacer eagle desde la calle. Ambos han sido golpes de tres cuartos, el primero con un wedge y el segundo con un hierro 9 desde unos 145 metros.

Adrian Meronk ha firmado hoy 65 golpes, la mejor vuelta del día junto a Jon Rahm, y se ha colado en el tercer partido por la cola. Jugará con Hatton. El polaco se juega mucho más que rematar con un gran final la mejor temporada de su vida. Ocupa el puesto 61 en el ranking mundial y necesita un gran resultado para meterse en el top 50 y asegurarse el Masters de Augusta el próximo año. La mala noticia para él es que sólo le vale ganar y ya ven los gallos que tiene por delante.