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Tras la conversación mantenida con Rory McIlroy, el español y el norirlandés han hecho las paces

La puerta de la Ryder, ahora sí, se le reabre de nuevo a Sergio

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Sergio García
Sergio García. (© Golffile | Mateo Villalba)

Las puertas de la Ryder Cup se le han vuelto a abrir a Sergio García después de la charla que ha mantenido con Rory McIlroy. El español y el norirlandés han hecho las paces, han aclarado el tremendo desencuentro que tuvieron a raíz de la marcha del golfista de Borriol a LIV Golf y una de las primeras consecuencias es que ahora sí no hay que descartar que acabe disputando la Ryder de Roma. Obviamente, eso sí, aún deben pasar varias cosas.

Sí se ha solucionado el principal obstáculo que había. El Circuito Europeo y, en consecuencia, los capitanes del equipo, con Luke Donald a la cabeza estaban preocupados por el hecho de que precisamente la tensa relación entre Sergio y Rory pudiera causar un problema en el vestuario de la Ryder. Desde ese punto de vista, sus opciones de estar en la cita de Italia eran mínimas, por no decir prácticamente nulas.

Sin embargo, ahora la situación ha dado un giro de 180 grados. La conversación que Sergio y McIlroy mantuvieron el pasado viernes ha calmado las aguas y la presencia del español en Roma ya no sería vista como un problema. Superado este obstáculo, aún quedan otros pasos que dar.

Lo primero es que Sergio García debería reingresar de nuevo como miembro del Circuito Europeo. Este punto, según ha podido saber Ten Golf, es factible. El golfista de Borriol no lo descarta. Para ello, primero tendría que pagar la multa que le ha impuesto el DP World Tour por jugar en varios torneos de LIV Golf sin el permiso pertinente. No hay que descartar, en este sentido, que se produzca una negociación entre ambas partes.

El otro asunto que debería cambiar es la propia regulación del Circuito Europeo. Hay que recordar que para poder jugar la Ryder Cup hay que ser miembro del DP World Tour desde el 1 de mayo, un requisito que Sergio no cumpliría. No obstante, el propio Keith Pelley, jefe ejecutivo del Circuito abrió la puerta a cambiar esa norma llegado el punto.

Así las cosas, ahora sí los planetas se van alineando para que Sergio pueda jugar en Roma. Lo último que quedaría, obviamente, y casi lo más importante es que Sergio juegue las próximas semana hasta la Ryder y se clasifique o Luke Donald decida darle una invitación.