Siguen pintando bien las cosas para la Armada española en tierras neerlandesas. Y eso que las primeras horas de juego de la segunda jornada del KLM Open han sido bravas y los resultados claramente peores que los del jueves. Jugadores como Adrián Otaegui (-6) y Pablo Larrazábal (-5), que salían muy bien posicionados en la tabla y con el objetivo, incluso, de alcanzar el liderato, se han encontrado con una mañana gélida y bastante viento, por lo que sus respectivos registros de 71 y 73 golpes pueden considerarse buenos.
Especialmente el del donostiarra, que ha jugado por debajo del par bajo en unas condiciones en las que no han abundado los competidores que le hayan ganado la partida al fantástico recorrido del Bernardus Golf (Cromvoirt, Paises Bajos). Una vez finalizado el turno matutino de juego, de hecho, Adrián Otaegui ocupaba la segunda posición, empatado con Marcus Armitage (-6), otro de los destacados del turno matutino con un registro de 70 golpes, a la espera de ver lo que ocurre por la tarde y, sobre todo, de comprobar cómo se maneja el líder destacado al inicio del día, el extremeño Jorge Campillo, que juega precisamente en el turno vespertino.
El jugador vasco ha reaccionado con brío por los segundos nueve hoyos del campo (la intensidad del viento iba descendiendo, todo hay que decirlo), con un parcial de tres menos en este tramo e incluso dejándose por el camino alguna buena opción de birdie, como la del hoyo 10, donde no acertaba con un putt de dos metros.
Hay que señalar que otros jugadores que también salían en el turno matutino, igualmente muy bien situados en la zona alta de la tabla como Pablo y Adrián, tampoco han podido progresar. Son los casos del francés Stalter (-5, hoy vuelta de 73), el tailandés Aphibarnrat (-4, vuelta de 73), el indio Sharma (-3, vuelta de 74), el italiano Molinari (-2, vuelta de 74), y sobre todo del inglés John Parry (PAR), que ha firmado una abultada tarjeta de 77 golpes, cinco sobre par.
Alfredo García Heredia (+1) también ha sufrido las duras condiciones matutinas, firmando una tarjeta de 75 golpes que, a pesar de todo, quizá le valga para pasar el corte. En este sentido, hay que ver cómo evoluciona el juego por la tarde. De entrada, estaba soplando menos el viento, aunque los greenes están más firmes que el jueves. Sebastián García Rodríguez (+3), por su parte, ha entregado una tarjeta de 72 golpes muy bien trabajada, aunque no le valdrá para estar el fin de semana.
