El moving day del Soudal Open nos ha dejado algunas cosas bastante claras. La primera es que no habrá victoria española salvo milagro. Santi Tarrio (-7) es el mejor de los nuestros, puesto 26º, a ocho golpes del líder Simon Forsstrom (-15). La mejor vuelta de la semana en el Rinkven International Golf Club ha sido un 64, siete bajo par. Pues eso, un milagro.
Lo segundo es que Thomas Detry (-14), el gran favorito de todos, sigue con sus opciones intactas. Hoy ha firmado una tarjeta de 66 golpes y se mantiene segundo en solitario, a uno de Forsstrom. Partido estelar el domingo y la afición de Amberes, su casa, entregadita.
El tercer tema es que no hay mucha experiencia ganadora en cabeza. Ninguno de los cuatro primeros ha vencido aún en el DP World Tour y en todo el top 10 apenas hay dos. Richie Ramsay y David Horsey. Además, ninguno es un recién llegado. Todos pasan de la treintena, a excepción de Andrew Wilson (-11), que tiene 29. Va a ser un día de nervios el domingo. Van a temblar las piernas. Y quien mejor lo sepa dominar, seguramente se llevará el gato al agua.
Todos los caminos parecen apuntar a una victoria de Detry, pero claro, han sido ya tantos domingos apuntando a lo mismo sin éxito con el jugador belga que es lícito tener reservas. Todo está a su favor: juega en casa, está más maduro por su paso por el PGA Tour y lleva tiempo jugando muy bien. Pero las faenas hay que rematarlas cuando toca y él, de momento, no ha podido. Son muchas cosas con las que tendrá que lidiar mañana mentalmente: primera victoria, en casa, segundo belga que gana su Open en toda la historia, la Ryder Cup… Veremos.
Tampoco será fácil para Forsstrom, que sólo tiene un triunfo en el Challenge Tour y fue en 2016. O para Julien Brun (-12), que sí ha ganado mucho en los circuitos pequeños y que está jugando muy bien este año, pero que tampoco ha sabido cómo rematar los domingos en la primera división. Lo mismo que Jens Dantorp (-12), un golfista que ha ganado mucho en el Challenge Tour, pero al que se le han atragantado siempre las alturas. Parece la batalla por ver quién se hace mayor en Amberes.
Es inevitable clavar la mirada en Richie Ramsay (-11). El escocés ha ganado cuatro veces en el Circuito Europeo, se mueve como pez en el agua en terrenos pantanosos y el campo parece diseñado para él. Como sea capaz de poner un resultado bajo, les va a meter mucha presión a los de delante.
En cuanto a los españoles, aún hay mucha batalla que lidiar. Tarrio, que hoy firmó una gran tarjeta de 67 golpes sin bogeys y con un birdie de fábula en el 18, tirazo a green incluido, está a sólo tres golpes del top 10, un objetivo más que razonable y muy agradable.
Lo mismo se puede decir de Ángel Hidalgo (-6). Hoy terminaba con agujetas de tanto remar tras empezar con un doble bogey en el hoyo 3. Sus dos birdies en los hoyos 9 y 10, el tercero más difícil y el más complicado de los 18 del Rinkven esta semana, lo compensa casi todo. Ha pegado una madera de época en el 10 para dejarla a un metro.
También tienen mucho que decir todavía Emilio Cuartero (-5), que suma tres vueltas bajo par y muy pocos errores en 54 hoyos, Adrián Otaegui (-4) y Alex del Rey (-3). Hay margen.
